You must like me for me
Delicate, Taylor Swift
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Después de un largo viaje de seis horas por fin estamos aparcando en la residencia.
—¿Te quedas? —le pregunto a Blake.
—Tengo que ir a casa —responde con una mueca. —Mis padres han vuelto hoy y necesito ropa limpia —me explica.
—No te preocupes, ¿nos vemos mañana después de clase? —sugiero.
Él asiente y me da un beso suave antes de darse la vuelta y caminar por el pasillo hasta la salida.
Me meto en la habitación y suspiro antes de empezar a quitarme la ropa y meterme en la cama, por fin.
Me despierto a las siete de la mañana cuando la alarma del móvil empieza a taladrarme los tímpanos, pero he de decir que he dormido toda la noche como un angelito.
Me lavo la cara y los dientes antes de vestirme con unos simples vaqueros y una sudadera, me meto en la mochila todo lo que voy a necesitar hoy y bajo a la cafetería donde me esperan Tom y Kate.
—Buenos días —saludo cuando llego a su mesa mientras les doy un abrazo corto a cada uno.
—Por fin estás aquí —dice dramático Thomas.
—Solo he estado fuera tres días —respondo divertida.
—Déjale, lleva en modo drama desde que te fuiste —explica Kate.
Thomas pone mala cara y yo me río.
Tomo un sorbo de mi café antes de que Kate hable.
—Oye, ¿por qué fue Blake también? —in quiere, cambiando de tema.
—¿Cómo os habéis enterado? —pregunto confusa.
—No le vimos en dos días así que le pregunté a mi hermano y me dijo que había ido a verte —me cuenta.
—Venga, cuéntanos —insiste Tom.
—Bueno... —no sé muy bien por dónde empezar. —No os lo he contado antes, porque no sé, no encontraba el momento y siempre me cuesta mucho contar mis cosas y eso —empiezo. —Sabéis que hay días que no he estado muy bien —los dos asienten espectantes. —Bueno, mi hermana tiene cáncer —cuento por fin, y antes de que puedan decir algo suelto de golpe. —Y mi madre murió hace dos años de cáncer también —terminó con un susurro.
Los dos están con los ojos como platos, pero reaccionan rápidamente.
—Lo siento mucho Savi, ni siquiera me imagino lo duro que será —me consuela Tom cogiendome la mano.
Kate asiente a sus palabras y me coge la mano también.
—Por eso Blake vino, porque estaba mal y decidió ir para estar conmigo.
—Que bonito —dice Kate al. borde de las lágrimas.
—Pensaba que el dramático era Tom —rio.
Ellos dos sueltan una risilla que acaba con la tensión del momento.
—¿Estás mejor? —pregunta Kate.
—Sí, todo está bien ahora —asiento.
—Me alegro mucho —sonríe Tom.
No nos da tiempo a mucho más porque el timbre suena indicándonos que es hora de empezar las clases.
La mañana pasa y siento un peso menos al haberles contado a los chicos lo que me pasaba. También lo sentía como un gran paso para mí, estaba abriéndome poco a poco y empezando a confiar más en los demás.
Salgo de mi última clase y me dirijo fuera al aparcamiento donde he quedado con Blake. Cuando llego él ya está allí esperando apoyado en su coche.
—Hola —le saludo cuando estoy a su altura y le doy un beso corto.
—Hola —me responde él sonriente.
—¿A dónde vamos? —pregunto cuando nos subimos al coche y arranca el motor.
—Ya lo verás.
Le pongo mala cara de broma mientras conecto mi música a la radio para hacer el viaje más ameno.
No tardo en diferenciar el lugar al que me lleva, el mirador donde nos dimos nuestro primer beso.
Para cuando estamos arriba y nos bajamos para sentarnos en el maletero como aquella vez.
—¿Has hablado con tus amigos? —me pregunta con curiosidad.
—Sí, esta mañana —asiento.
—¿Y qué tal ha ido?
—Mejor de lo que me esperaba, me he quitado un peso de encima —le respondo con tranquilidad.
Él asiente y me rodea los hombro con el brazo para atraerme a su pecho y besar mi cabeza.
—¿Sabes con qué he soñado hoy? —empiezo, girando mi cabeza para mirarle. Él hace un movimiento de cabeza para que siga. —Con el viaje a las Vegas —le cuento.
—Fue un muy buen viaje —asegura él con una sonrisa ladina.
—Está mañana, después de hablar con Kate y Thomas, he estado pensando en lo distinto que pensaba que iba a ser esto —comienzo de nuevo, esta vez mirando al horizonte. —Pensaba que iba a ser igual de mal que siempre, bueno, aún peor ya que sin mi padre y mi hermana —confieso. —Pero luego Tom se metió en mi habitación —él enarca una ceja Co fuso y yo río un poco. —Un desconocido se metió en una de mis fotos —le miró con una sonrisa.
—En realidad, lo hice a propósito —confiesa, aunque eso ya lo sabía.
—Hace tiempo que me dí cuenta de eso —respondo, y los dos soltamos una risa.
—Luego también conocí a Kate —continuo. —Y tú, me conociste a mí.
Levanta mi barbilla con suavidad y planta un beso en mis labios.
—Vosotros tres estáis haciendo esto muy distinto a lo que esperaba —termino.
Hacia tiempo que quería decir todas estas palabras en alto.
—Eres lo más difícil y lo más sincero que me ha pasado nunca —confiesa con una sonrisa.
Sonrío, soy difícil, jodidamente difícil. Pero aquí está, diciéndomelo mientras me confiesa lo importante que soy para él, porque lo que mejor me ha demostrado Blake es que no puedes querer a alguien si no quieres también a sus defectos.
Él no dudó en quererme al completo.
—Eres todo lo que jamás pensé que volvería a sentir Blake.
Y con eso, creo que no hacen falta más palabras.
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Hoola! Perdón por tardar tanto en actualizar.Espero que os guste❤️
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101 Latidos
Teen FictionSavannah Brown se ha pasado la vida contando días, horas, segundos y latidos, muchos latidos. Espera que su vida tome otro rumbo ahora que empieza la universidad, quizá alguien le enseñara a vivir de verdad y a no esperar que la vida cambie para ell...