Percabeth: La historia Del Mar y la lechuza

Dia en el Olimpo IV

Olympus
Febrero 29 2020
Omnisciente POV

El Olimpo... el hogar de los dioses... la morada divina... ahí cientos de seres paseaban por los bellos y amplios jardines, jardines en los que plantas de todos tipos crecían, granadas, olivos, fresnos, pinos, robles, manzanos, viñas; dichos jardines se extendían tanto que había cientos de metros de estos entre cada uno de los templos

El puente que unía el elevador con el resto de la ciudad estaba hecho de enormes bloques de oro dispersos como ladrillos, un pequeño barandal con decorados azul eléctrico evitaba la caída, aunque en realidad sería imposible, pues los dioses de los vientos evitaban eso, al mismo tiempo que, junto a la niebla, ocultaban la magnificente ciudad de los ojos mortales, a veces por medio de nubes las cuales se podían observar al ver por el barandal del puente, y otras por medio del reflejo del sol

En la ciudad un camino hecho de mármol llevaba a cada uno de los templos y palacios, residencias permanentes y temporales, de los dioses tanto Olimpicos como menores, Ctonicos y algunos marinos, aunque eso no era todo, un sin número de estatuas decoraban los jardines, había unas cuantas de Afrodita, de Apollo y Ares las cuales se veían antiguas, aunque otras eran mucho más recientes, como una estatua de diez personas, nueve semidioses y un sátiro, diez quienes fueron los 'héroes' que derrotaron a Gaia

En uno de los jardines más alejados una estatua de Tyche, junto a una de Nike, se elevaban en todo su esplendor, ambas estatuas emitían poder, un poder que representaban a sus versiones reales, las cuales tenían sus templos, y residencias, en otro punto de la ciudad

Una gran ciudad, una ciudad que en el pasado fue construida por dioses y para dioses, donde la presencia mortal (incluso de los semidioses) no era aceptada; sin embargo, ahora la ciudad había cambiado, no solo sus construcciones se veían más modernas, aún conservaban su esencia arcaica, la prueba de que era, en efecto, la morada de los dioses

El camino de mármol serpenteaba entre los caminos, dividiéndose como ramas de un árbol (como ya se mencionó), y llegando a las puertas de los cientos de templos, la arquitectura de estos variaba, y era de acuerdo a los dominios de los dioses, grandes pilares de mármol y puertas de oro, techos inclinados y parte-aguas, diseños variados y detalles que le daban aspectos únicos a cada uno de los templos,

Todos, y cada uno de ellos fue creado y diseñado por Olympus Architecture, o al menos la parte en la que solo semidioses, y legados, trabajaban, esto generalmente se hacía en la casa de la CEO, Annabeth Chase, quien dedicó doce años de su vida a la remodelación del Olimpo post-Guerra, y a pesar de que prácticamente todo el Olimpo era obra de ellos sin duda alguna, su Magnum Opus era la sala de trono

Midiendo ciento veinte metros en cada lado, y con la forma del Partenon en Athenas, la gran sala de trono se alzaba de manera espléndida y suntuosa, a pesar de que únicamente medía 100 metros de altura, sus columnas doradas reflejaban el sol o la luna (dependiendo si era de noche o de día), sus puertas de pino con detalles plateados se alzaban en el centro de este, enfrente de este un jardín con cientos de flores distintas y estatuas de los 14 Olímpicos

Aunque, en realidad, la gran obra estaba dentro, donde los dioses Olímpicos hacían sus grandes asambleas, donde discutían los problemas del mundo, dentro de esto, todo había sido remodelado, reconstruido desde cero, cada uno de los tronos había sido reacomodado, dejando espacio para que dos 'nuevos' tronos sean instalados, un trono de cada lado del círculo incompleto

Antorchas adornaban las paredes, su tenue luz contrastaba a la perfección con el dorado de las columnas, mientras el techo abovedado permitía la vista del cielo estrellado, o nublado, aunque en unas ocasiones se podía ver despejado, esto gracias a que la cúpula estaba hecha de cristal, un cristal tan transparente que parecía que no hubiera tal