Percabeth: La historia Del Mar y la lechuza

Una hidra diferente

New York
Octubre 13 2017
Omnisciente

La pareja recorría las calles de New York cerca de una bodega abandonada, habían recibido informes de que habían visto un monstruo grande en la zona, se lo habían dicho las ninfas, así que habían decidido ir a investigar, preferían lidiar con eso ellos mismos a arriesgarse a que un campista salga herido, principalmente por que el monstruo que habían reportado era uno bastante peligroso, una Hidra, Percy esperaba que no sea la Hidra

Aún así ahí estaban ambos, sosteniéndose de las manos, las sortijas de compromiso brillando bajo el sol y una sonrisa en su rostro, Percy no pensaba que una Hidra vuelva a arruinarle el día, si descubría que era eso le lanzaría su espada a la primera cabeza, tomaría a Annabeth por la cintura y se la llevaría a rastras si era necesario, no pensaba arriesgarse

Annabeth por otro lado estaba decidida a eliminar la amenaza, Percy sabía que no le gustaba meterse en esa batalla, principalmente por que debería estar yendo a Alemania en los próximos días, pues había conseguido un contrato para una construcción, y como Annabeth quería supervisar la obra también habían construido unas pequeñas oficinas para que trabaje ella junto a los demás arquitectos y los ingenieros

"Percy... recuerdas el plan?" Pregunto ella deteniéndose, aunque el siguió avanzando causando que diera media vuelta debido a sus brazos unidos

"Ohh... si, el plan" comentó el evitando mirarla a los ojos, quería decirle que odiaba el plan era demasiado riesgo, y a pesar de que el no era el mejor con los números no se necesitaba aún genio para ver las probabilidades de que vaya mal

"Si no te agrada el plan puedes decirlo, sabes?" Le dijo ella como si fuera obvio, Percy suspiro, el plan era bueno en realidad, ya habían hecho muchas veces cosas parecidas, pero las cosas habían cambiado, lo único que quería Percy era tener un poco de paz, pero con quien era su padre sabía que le resultaba imposible,

"No es eso..." murmuro sin mirarla a los ojos, Annabeth comprendió al instante lo que pasaba, lo conocía bien, después de todo los primeros años de su amistad los vivieron al límite de tal manera que sabían cómo reaccionaba el otro en diversas situaciones

"Estaré bien, te tengo a ti" dijo ella, Percy miró sus ojos, podía ver la esperanza en ellos, podía ver el futuro que les aguardaba, en secreto el también guardaba la esperanza de que su vida como semidioses sea más tranquila, no quería contársela al mundo, sentía que si lo hacía este haría todo para que el tenga el mismo final que los demás semidioses, para que no pueda ser feliz, a pesar de que lo era en ese momento

"Solo..." empezó antes de cerrar sus labios "si las cosas se complican sal de ahí" pidió el mirándola a la ojos, ella puso sus manos sobre los hombros de él, obligándolo a bajarse a su altura, aunque no era mucho, solo un par de pulgadas, ambos habían crecido bastante desde que las guerras terminaron, tanto mental como físicamente

"Siempre juntos" Aseguró ella, el le dio una sonrisa corta antes de recibir un beso en los labios "para la buena suerte" agregó, Percy río por lo bajo recordando la batalla de Manhattan, Annabeth dejó ir a Percy y continuo caminando en dirección a la bodega abandonada con Percy siguiéndola

"Sabes?" Comentó Percy "Sigo pensando en que podría alterar tanto a los monstruos, creo que visitaré a mi padre mientras estas fuera" comentó el, Ella lo miró de reojo, sabía que a Percy le preocupaba mucho el mar, por eso había adoptado a una cría de hipocampo y la tenía rondando el Yate, pues la encontró perdida en un lago de Oklahoma, aunque no pudo encontrar a la madre

"Es una buena idea... pero no olvides de llamarme, quiero saber qué tal te va entrenando con los demás dioses Del Mar" dijo ella a modo de broma, pues a pesar de que Percy se había hecho un nombre en los mitos de la superficie seguía siendo ignorante a todas las costumbres Del Mar, ademas de que había unos cuantos que no le tenían mucho cariño, como Despena o Khimpolea, y si se quería llegar a extremos a Océano