25. Viaje

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Esa mañana Aisslyn se levantó temprano, su avión partiría en solo dos horas y necesitaba estar ahí. Stephanie se ofreció a llevarla ya que después se iría a su trabajo. Se había despedido de todos la noche anterior para no despertar a nadie tan temprano. Puso sus últimas cosas en la pequeña maleta y después salió casi de puntitas de su habitación.

Salió a la calle, el sol todavía estaba oculto y eso hacía que sintiera más frio. Se encontraba toda cubierta, llevaba unos pantalones de color negro, con sus botas del mismo color, encima un saco de color morado y botones negros, con una bufanda morada. En la cabeza llevaba un gorro de tela color negro. Y en las manos unos guantes negros. Stephanie no tardó en llegar por ella, así que no soportó por mucho tiempo el frio.

Al llegar al aeropuerto y despedirse de Stephanie se sintió un poco nostálgica, odiaba dejar a los chicos ahí, pero de todas formas muchos regresarían a sus ciudades natales. Eso la consolaba un poco. Ahora se sentía extraña de regresar a México. Ya había pasado mucho tiempo desde que no estaba por aquellos rumbos y era raro volver. Después de conseguir su pase de abordar y de esperar un tiempo en la sala de espera, llamaron a los pasajeros.

Aisslyn caminó hasta su asiento, sin apuros, colocó la pequeña bolsa de mano sobre ella y después se dispuso a sentarse, le tocó a lado de la ventana. Mientras esperaba a que despegaran se dedicó a mirar por la ventana pero entonces. Tal vez este sería un buen momento para pasar un tiempo con ella misma, despejar su mente y reflexionar sobre las cosas que un par de chicos la hacían sentir. No era justo que estuviera teniendo esta crisis. Bien podría pasar un tiempo sin ningún compromiso, siendo soltera disfrutando de su vida en soledad. Que deprimente sonaba eso. ¿Crisis o soldedad?

Alguien detrás de ella se aclaró la garganta, parecía que le hablaban así que volteó. Aisslyn se sorprendió al verlo ahí, la miraba fijamente con sus ojos verdes y su sonrisa maliciosa.

-¡¿Harry?! - dijo sorprendida- ¿Qué diablos haces aquí?

-Pues que más, voy a viajar - entornó los ojos y se sentó a su lado.

-Tú no necesitas un avión para llegar a casa -le dijo con los ojos entrecerrados.

-No tontita, no voy a casa. Voy a acompañarte a México -le dijo Harry sonriendo de oreja a oreja.

-¿Qué? -preguntó sorprendida - ¿desde cuándo necesito guardaespaldas?

Harry soltó una carcajada.

-No tienes que ir Harry, bájate del avión -le ordenó ella.

-¿Por qué? Yo compré mi boleto, como cualquier pasajero.

-Pero aun puedes pedir un reembolso -le dijo ella, claramente molesta -vamos, no tienes por qué ir.

-Sí, quiero acompañarte, me acostumbré mucho a verte diario así que si no te veo en unos días muero.

-Eres un exagerado Harry Sty... - Harry le tapó la boca.

-No grites mi nombre en lugares públicos o en cualquier momento las fans llegaran -dijo en un susurro.

Ella lo miró mal.

-Bájate- le ordenó.

-No, yo voy.

-No vas, bájate -cuando comenzó  pararse y comenzar a jalonear a Harry una azafata se paró a su lado.

-Disculpen, deben de tomar asiento y abrocharse los cinturones, el avión ya va a despegar.

Harry se encogió de hombros mirándola maliciosamente.

-Eres increíble Harry -dijo molesta mientras se abrochaba el cinturón -Y también investigaste en que asiento me senté ¿cierto?

I Didn't Expect That... { l.t & h.s. }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora