I Didn't Expect That... { l.t & h.s. }

21. Beso

La tormenta golpeaba fuertemente la ciudad esa noche y un chico con el corazón destrozado caminaba por la banqueta. Por un rato caminó sin rumbo, hasta después de dejar sus pensamientos a un lado ubicó el lugar en donde se encontraba. Ahora se arrepentía de no aceptar la ayuda de sus amigos. Había un lugar cerca de ahí, donde alguien podría, aunque sea, darle compañía.  Caminó hasta ese lugar, topándose con la puerta trasera del gran edificio. Era una locura, en realidad no sabía porque sus impulsos lo habían llevado hasta ahí. Giró sobre sus talones para irse de ahí pero a sus espaldas escuchó que la puerta se abría y su corazón latió fuertemente. Una chica estaba parada en el umbral, mirando hacia los lados y tratando de abrir un paraguas. Liam se acercó a ella y Stephanie lo reconoció de inmediato.

—¡¿Liam?! ¿Qué haces aquí? —dijo con sorpresa.

Él se limitó a mirarla, quiso decirle algo pero las palabras no le salían. ¿Cómo explicarlo?

—Ven pasa —le dijo tomándolo del brazo para meterlo al edificio.

—Yo no debí de haber venido —susurró él con tristeza —estoy interrumpiendo tu trabajo.

—Hace más de una hora que terminé, pero la lluvia no se calmó —explicó ella — ¿Por qué has venido?

Liam se dejó caer y después suspiró profundamente. Stephanie asustada se agachó frente a él. Tomó en sus manos su cara, temía que estuviera herido o que algo físico le estaba sucediendo, pero sólo pudo ver tristeza en sus ojos. Intuyó lo que pasaba pero no preguntó, tal vez después él se lo contaría. Limpió un poco la humedad del rostro de Liam, él se limitó a mirarla fijamente.

—No quiero estar solo —dijo él frunciendo el ceño —no debí apartar a mis amigos que sólo querían ayudarme, pero ahora estoy muy lejos de casa y llueve…

—Yo te haré compañía, si quieres —murmuró Stephanie aun mirándolo.

—Era lo que venía a buscar —dijo él con una amarga sonrisa —tu compañía. Es agradable estar y platicar contigo.

Stephanie sonrió ruborizándose un  poco.

—Pero vámonos a otro lugar, a algún lugar más cómodo –Stephanie miró a su alrededor e hizo una mueca.

—Vamos —dijo Liam parándose del suelo.

—Mierda, mierda —repetía Aisslyn con su celular pegado a su oreja.

Era la doceava vez que trataba de comunicarse con Gabrielle, pero ella no respondía. O había mala señal o ella no quería hablar con nadie. Aisslyn estaba casi segura que era la primera opción. Seguía preocupada por el asunto del fin de su relación con Liam y quería ayudarla.

—Vamos, contesta, contesta —decía mientras escuchaba aquel sonido en el teléfono y al mismo tiempo la buscaba en el internet.

Alguien tocó la puerta y ella instantáneamente gritó “pase”, Harry entró a la habitación después de escuchar eso. En una mano llevaba un plato con un sándwich y en la otra un gran vaso de leche. Se acercó hasta la cama, donde ya hacía Aisslyn con su computadora en sus piernas y su celular pegado a su oreja.

—¿A quién intentas localizar? —preguntó Harry curioso.

—A Gabrielle, ella necesita de mí —dijo rápidamente.

Harry se sentó en la cama y le pasó la comida a Aisslyn.

—Gracias —dijo ella tomando el plato.

—No creo que la localices —dijo Harry —Tal vez no te necesite tanto como crees.

Aisslyn bufó.