Holding on and letting go

Cap 26

Capítulo 26

Sophie

“But if I had you, that would be the only thing I'd ever need

Yeah if I had you, then money fame and fortune never could compete”

Louis me envió un mensaje a las cuatro diciendo que me recogía a las seis y media para ir a un lugar especial. Me alegró mucho ya que estaba muy aburrida en mi casa. Toda la mañana me la pasé viendo películas en la tele. Eso era lo único malo de vivir sola. No tienes compañía y hay veces en las que no sabes que hacer y te deprimes.

Me puse un vestido corto de color azul marino, no me puse tacones ya que nunca sabes a qué lugar Louis De Font te puede llevar. Llegó puntualmente como siempre y subí a la camioneta.

-Te ves hermosa

-Gracias –siempre me decía lo mismo pero aun así sentía que me ruborizaba

-Gracias. ¿A dónde iremos?

-Es sorpresa

-Por lo menos dime una pista

-No, lo siento.

Después de pelearnos por todo el camino llegamos al laberinto Eyrignac.

-¿Un laberinto? –pregunté sin poder creerlo. Nunca había entrado  uno.

-Sí, ven hay que entrar.

La entrada era gratuita y no había mucha gente. Al entrar vi que había dos caminos. Uno hacia la derecha y otro hacia la izquierda.

-¿Cuál elegimos? –me giré para verlo pero había desaparecido. Me había dejado sola en el laberinto. Si me iba a la izquierda que es obviamente por donde se fue él, nunca lo encontraría ya que hay demasiados caminos y él pudo haber tomado cualquiera. Me quedé parada dónde mismo y saqué mi celular para mandarle un mensaje.

“Porque me dejaste sola?! Me voy a perder y nunca te voy a encontrar!

Pasaron segundos y obtuve su respuesta

“Hermosa, solo sigue las pistas. Aquí te daré la primera. Vete hacia la derecha y tú solo camina hasta que veas algo que te llame la atención”

¿De qué rayos estaba hablando? Decidí hacerle caso. Era mi única opción. Así lo encontraría y lo golpearía. Gracias a dios no me puse tacones, así que pude caminar un poco más rápido. Seguí caminando hasta que vi otra vez dos caminos. ¿Cuál debía tomar? Había una foto pegada en el muro del lado izquierdo, la tomé y en la foto estábamos Louis y yo. Recordaba esa foto, fue el día de su cumpleaños, antes de que besara a Hanna. Tomé el camino izquierdo y seguí caminando hasta que me encontré con otros dos caminos. Había una carta en la entrada del camino derecho. La tomé y seguí caminando mientras la leía.

“Sé que estas confundida y no sabes lo que está pasando, pero tú solo sigue con el juego y pronto lo descubrirás.

PD: ¿Sabes que me encanta cuando te enojas conmigo y empiezas a criticarme? Te diré un secreto, siempre ignoró lo que dices y solo observo cómo te vas enojando más y más hasta que se pone roja tu cara, lo cual me agrada mucho (: ”

Seguí caminando y ahora me encontré con un globo pegado en el muro izquierdo. En el globo decía “Te quiero mucho”.

Después me encontré un mini oso de peluche con un post-it que decía: “Ya casi llegas, testaruda”

Tomé el camino central ya que estaba lleno de pétalos de rosa y llegué a un hermoso jardín. Había muchos faroles, mesas con velas en el centro que iluminaban todo a su alrededor. En una de las mesas había otra carta. Fui hacia ella y la leí

“Te he traído a este lugar para preguntarte algo muy importante. Primero pon todas tus cosas en esta mesa y después ve al kiosco”

Dejé mis cosas y fui al kiosco que estaba al centro. Los nervios me estaban matando. Louis quería preguntarme algo y solo se me ocurría una cosa en mi mente. Subí los tres escalones que había y esperé. De repente escuché una canción conocida. Era la que había bailado con Louis el día de la fiesta cuando Hanna llegó y lo besó. Creo que se llamaba Holding out y sabe que más. Alguien me abrazó por detrás y besó mi mejilla.

-Pensé que nunca encontrarías el lugar

-No soy tan distraída como tu

No podía ver su rostro pero aun así supe que había sonreído.

-¿Planeaste todo esto para mí? –dije mientras me giraba para verlo. Me tomó la mano y empezamos a bailar. No muy bien que digamos ya que Louis siempre me pisaba.

-Sí, bueno con la ayuda Henry y Nathan.

-¿Zach no?

-No, al parecer está un poco enojado conmigo

-¿Por qué?

-Porque me gustas y al parecer él también te quiere

-Oh…-fue lo único que pude decir. Para ser honesta no me sorprendió. Ya lo había deducido hace tiempo.

-Sophie… ¿a ti te gusta Zach? –preguntó tímidamente mientras paraba de bailar

-¿Cómo puedes preguntar eso? El único muchacho que me gusta está en frente de mí. Si me gustara Zach no estaría en este hermoso lugar bailando contigo. Nadie había hecho algo parecido para mí. ¿Si lo entiendes? ¿O quieres que te explique de otra manera?

-¿Qué tipo de manera se te ocurre? –dijo enarcando una ceja

-Se me ocurren varias –dije sonriendo –Pero me las guardaré para después. Hoy haré algo sencillo. –Me acerqué a él y lo besé.

Louis tomó mi cara entre sus manos y profundizó el beso. En vez de sentir mariposas en el estómago, sentía todo un zoológico. Era increíble cómo cambiaron mis sentimientos por el a lo largo del tiempo. Al principio no era una de mis personas favoritas pero algo me atraía de él. Eso hiso acercarme más a él a pesar de nuestras peleas y conflictos. Supe desde un principio que él me quería. Tal vez era porque sus ojos cambiaban de color cuando me veía solo a mí. Se volvían más oscuros. A veces pensaba que solo era una alucinación. Pensaba que él quería a otra persona, tal vez a Hanna. Al final descubrí que no. ¿Por qué duré tanto? Bueno, a lo mejor fue porque soy una de las típicas niñas que esperan a que ellos nos hablen primero. Lo bueno de mi caso fue que él se atrevió. Claro, tuvo muchos errores. Demasiados para ser honesta. Lástima que algunos no se atreven y nunca dan el primer paso al igual que las mujeres. Y ahí muere una relación que pudo haber sido grande y especial.

-Así que Sophie –dio antes de tomarme de la cintura y darme una vuelta por el aire -¿Quieres ser mi hermosa novia?

-Si –dije riendo para después darle un gran beso.