Holding on and letting go

Cap 55

Capítulo 55

 

Que romántico –dijo Valerie mientras se dejaba caer en su cama-Quiero que me leas la boda

-¿Quieres decir que quieres que me vuelva a saltar varios capítulos hasta que llegue a la boda?

-Exacto –dijo sonriendo-Me imagino que sería muy emocionante organizar tu propia boda

-Sí, aunque para ella fue un poco estresante

-¿Por qué?

-Lo hiso todo muy rápido por miedo de que el tiempo de Louis se acabara antes de la fecha de la boda, no pudo disfrutar mucho el proceso de los preparativos pero sí que disfrutó de la fiesta"

Era el día de la boda. Ya estaba arreglada esperando el gran momento. Mi papá vino y me tomó de la mano para ir hacia el altar. Ahí estaba Louis esperándome. Había muy poca gente en la misa, pero lo importante era que estaban todos mis amigos. Louis se veía muy pálido y seguido cerraba los ojos. Cuando mi papá me dejó en el altar, Faye quien estaba sentada junto con Evelyn me guiñó un ojo y sonrió.

-¿Estas bien? –susurré

-Perfecto –dijo Louis sonriendo.

-Estamos aquí para celebrar la nueva vida de Louis y Sophie

Volteé a ver a Nathan quien era el sacerdote.

-¿Aceptas a Louis?

-Si

-¿Louis aceptas a Sophie?

-Yo...-dijo susurrando –No puedo....no puedo...respirar –cayó al suelo y empezó a toser fuertemente.

-¿Louis? –Dije mientras me agachaba a su lado – ¡Nathan, llama a una ambulancia!

¡Una ambulancia! ¡Nathan, pide ayuda! Louis reacciona, no te vayas en este día, por favor.

-Mátame

-¿Qué? –dije con lágrimas en los ojos.

-Así no sufriré tanto...por favor. –se estaba convulsionando y no sabía que hacer

-Pronto vendrá una ambulancia y estarás mejor.

-No...es hora–salía espuma rosa de su boca.

-¡Louis! –puse mis manos en su pecho, mientras sus ojos se cerraban. Tomé su pulso pero no había latidos.- ¡Louis!

Desperté empapada de sudor y con lágrimas en los ojos. Me senté y respiré profundamente. Solo había sido un sueño, un mal sueño. Cuando mi respiración se calmó junto con mis latidos, abrí los ojos. Estaba en mi habitación. Estaba a salvo. Un relámpago sonó y casi brincaba del susto. El otro lado de la cama estaba vacío. Louis no estaba. Me levanté y vi el reloj que marcaba las tres de la mañana. Lo busqué en el baño pero no había rastros de él. Salí de la habitación y casi tropezaba con las cajas de la mudanza. Mañana el departamento estaría solo y viviríamos en otro lado. Fui por un vaso de agua a la cocina y me percaté que la puerta del balcón estaba a vierta. De seguro Louis estaba afuera.

-¿Qué haces? –pregunté en cuanto lo vi sentado en una pequeña banca que teníamos.

-No podía dormir.

-¿Relámpagos?

-Ya llevan una hora y ni siquiera ha empezado a llover.

-¿Una hora?–dije sentándome en sus piernas. Me envolvió entre sus brazos y acomodé su cabeza en su cuello –Apenas los escuché. Tenía una pesadilla