Karma | Iván Guzmán

26

—Sabes que no puedo prometerte esconderle un secreto a tu padre, Ivanka. Él puede enterarse de una u otra forma.

—Por favor Amber, te lo suplico—La rubia acompaña a su puchero juntando sus manos debajo de su mentón.

—De mi boca no saldrá nada pero si tu padre me pregunta tendré que considerar el peligro que corren, no estás saliendo con cualquiera—Le recuerdo.

—Ash simplemente es el hijo del ex presidente municipal.

—Un pendejo que está encerrado por corrupto—Murmura Joaquín llevándose un golpe de parte de su hermana por lo que los regaño antes de que comiencen sus típicas peleas.

—No lo sé cariño, temo que tu padre se entere y...

—Oye ¿Esa no es la hija del viejo de la aerolínea?—Dejo en su lugar la prenda que estaba detallando para poder observar a los dos hombres que, según ellos, me miran con disimulo.

—¿De qué hablas wey?

—El viejo ese, el que quiere ser político.

—¿El que tiene comprado a medio México?

—Lo mejor será irnos ¿Verdad?—Asiento aceptando que Joaquín nos pase sus brazos por los hombros y así los tres salgamos con rapidez de la tienda siendo escoltados por una cantidad de hombres un tanto exagerada para la mirada ajena.

—¿Qué fue eso?—Ivanka es quien habla una vez que decidimos que lo mejor es perdernos en el mundo de personas que es la tienda proveedora de famosos cafés.—Creo que no soy la única que tiene para dar que hablar con las relacione...

—Ya no digas chingaderas, Ivanka y céntrate en lo que eso significa.—Agradezco al escolta por los tres cafés que nos provee y por más que lo intente no puedo mantener mi atención en los hijos de Iván, lo que dijeron de mi padre-pues no caben dudas que hablaban de él y lo conocían muy bien- dejó muchas dudas en mí ¿A qué se refieren con que quiere ser político y que tiene comprado a medio México? Mi familia, principalmente mi padre, han aborrecido desde que tengo memoria al narcotráfico y seguido a todo ello, el mundo de la política. ¿Por qué razón mi padre quisiera indagar en ese mundo? Y además ¿por qué yo no estoy al tanto de eso?
Borro esa incertidumbre y las dudas que se puedan llegar a generar por simples rumores de personas a las que ni siquiera conozco, seguro todo es parte de un chisme.—Significa que ya saben que Amber está aquí y no nos hagamos... tontos—Joaquín me mira y lo agradezco, no estoy acostumbrada a las palabras groseras—Pronto su familia vendrá a por ella.

Ivanka muerde su labio y su mirada, cargada de preocupación, se pasea por toda la plaza a través del vidrio, tal vez meditando que dirá.

—Puede decir que está trabajando aquí con mis fiestas, eso le tomará un mes al menos.—Joaquín asiente y deja de lado el vaso, ambos me miran, parece que recordaron que también estoy aquí por lo que tras preguntarme qué me parece su idea simplemente argumento que lo mejor será marcharnos, con los niños -que son casi de mi misma edad- ya hicimos las diligencias necesarias para comenzar a organizar su fiesta de cumpleaños.

—Oye no te agüites, es normal que hablen de nuestros padres, la gente es chismosa—Una vez arriba de las camionetas el viaje se vuelve eterno y silencioso, hasta que Ivanka acaba con él brindándome una cálida sonrisa y una caricia en mi brazo intentando reconfortarme, lo cual logra generándome ternura. Joaquín simplemente nos observa, y a pesar de que hace poco tiempo lo conozco, al ser un chavo de pocas palabras, sé que con su mirada intenta subir mi ánimo lo cual agradezco, son unos niños muy dulces, hasta parecen ajenos al mundo que los rodea.

Unas dos horas después al fin llegamos a la propiedad de Iván, literalmente, en medio de la nada. Tanto tiempo sin hacer nada solo provocó que la incertidumbre no dejara mi mente en paz ni un segundo, siempre supe que mi familia es reconocida por su riqueza y las propiedades y empresas que han ido perdurando en el tiempo y debido a sus servicios han sido y siguen siendo potencialmente útiles para la sociedad.