Un chico en TWICE

Capítulo 83

Cuando noté a Tzuyu ya cansada y su voz ya empezaba a rasparse, decidí parar y solamente charlar, aunque en su mayoría Lisa y yo, Tzuyu descansaba en mis brazos.

—Ah, ya son las ocho, debería regresar con las chicas.— comentó

—Déjame llevarte.— dije

Asintió.

—Ahora vuelvo, mi amor.— le dije a Tzuyu

—¿Lo prometes?— me miró

Sonreí.

—Lo prometo.— acaricié su mejilla

Sonrió, besó mis labios y se levantó, así que salí junto a Lisa de ahí y ambos nos fuimos juntos a mi auto nuevamente.

Me dio la dirección de su dormitorio y ahí simplemente la llevé.

—Fue un lindo día.— comentó sonriente

—Sí, lo fue, gracias por acompañarme.— le sonreí

—No hay de qué, somos amigos.— dijo ella

Se dio la vuelta para subir los escalones, así que sólo me despedí y entré de vuelta al auto para volver con Tzuyu.

Y mientras caminaba por el pasillo, me topé justamente a Chaeryeong...

—B-b-bebé... ¡be-bebé!— saltó a mis brazos

Me llenó de besos con una enorme emoción para al final, besar mis labios.

—Ya te extrañaba, gracias por venir.— sonrió

—Esp-espera, preciosa, e-espera un poco.— la tomé de la cintura y la intenté separar de mí

Volvió a llevarme a sus labios, así que nos volvimos a besar.

—¿Te gustó el vídeo que te mandé?, quiero hacer otro, pero contigo. Vamos a los baños...— susurró

Tragué saliva.

—Espera un poco, linda, tengo ensayo...
— le dije

—¿Ensayo de qué, mi cielo?— besó mi mejilla y mis labios

—A-ayudaré a alguien en su presentación en los MAMA.— dije

—¡¿De verdad?!, ¡bebé, que bueno!, ¡que alegría me da por ti!— besó mis labios —Mañana iré a verte, ¿vale?— sonrió

Asentí ligeramente.

Besamos nuestros labios una última vez y solamente tomamos caminos separados.

Me recargué en la pared y suspiré...

Al final sólo volví con Tzuyu, quien estaba en el piano.

Me sonrió al entrar, pero sólo me acerqué.

—¿Pasó algo, bebé?— se levantó al yo ir a sentarme en la silla de en frente

—No, no, sólo... no es nada, está bien.— le fingí una sonrisa

—Oye, bebé...— subió en mis piernas —Dime qué pasa, sé que te pasa algo y me siento muy mal si no te ayudo.— me abrazó