Capítulo 157

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—Ahí está.— dije

Me estacioné junto a la acera y toqué el claxon.

Se acercó al asiento del pasajero y abrió la puerta con una enorme sonrisa, pero se asombró un poco al ver a mi novia en el asiento. Las ventanas son obscuras, así que es por eso que no vio quien estaba a mi lado.

—Eh... pensé que vendrías sólo. I-iré atrás.— dijo

Abrió la puerta trasera y simplemente entró.

—T-te compré algo para comer, ____.— dijo

—Que lindo detalle, gracias.— le agradecí

—N-no sabía que tú también vendrías, Tzuyu, así que no pude comprarte nada...— dijo

—No te preocupes, no lo iba a aceptar de todos modos.— respondió mi novia

—Sí, eh... acabamos de comer, Dahyun, pero muchas gracias.— le sonreí por el retrovisor

—No hay de qué.— me regresó la sonrisa

Acaricié la mano de mi novia y la miré para asegurarme de que todo estaba bien.

Tenía una expresión seria, pero parecía bien dentro de lo que cabe.

Tras tal vez veinte o treinta minutos llegamos al set.

Dahyun fue la primera en bajar, pero justo antes de que lo hiciera mi novia, tomé su mano.

—¿Todo bien?— pregunté

Me miró y asintió.

—Amor...— seguí acariciando su mano

—No lo sé, bebé, quiero mucho a Dahyun, pero cuando veo cómo actúa cuando está contigo sólo quiero darle una bofetada.— dijo —Agh, no es verdad, pero sé que algo siente en el corazón cuando te ve y no puedo evitar enojarme...—

—¿Qué quieres que haga para que confíes en mí?, dejaré el drama a un lado, encenderé el auto y nos vamos de aquí.— reí ligeramente

—Tonto...— rió también —Confío en ti, pero no en Dahyun.— dijo

—Pondré un límite cuando se trata de ella.— le dije

Asintió ligeramente.

Apagué el motor del auto y desabroché el cinturón.

—No te vas a bajar sin besarme, ¿verdad?— dijo

—Por supuesto que no.— me acerqué y la besé —¿Estás segura de que no quieres que nos vayamos?— pregunté

—Por supuesto que sí, bebé, pero te causará problemas.— respondió

—Je. Cereza, mi favorito...— mordí sus labios

—Por eso me lo puse.— dijo

—¿Chicos?— Dahyun volvió a abrir la puerta —Pe-perdón, no quería interrumpir.—

—Vamos, cielo.— besé su frente y sus labios para finalmente ambos bajar

Caminamos los tres juntos hacía el edificio, por supuesto, Tzuyu y yo tomados de la mano.

Un chico en TWICEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora