Capítulo 107

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—Oh, hey.— curiosamente me topé con Tzuyu mientras lavaba mis manos

—Ah, hola otra vez.— saludé de vuelta

—Eh... esto... ¿cómo has estado?— preguntó

—Eh... ¿bien?— reí ligeramente, no sabía a dónde estaba yendo

—Jeje, que bueno, me alegro mucho por ti.— sonrió aún más

Extrañamente, nos quedamos charlando por cinco minutos. Por primera vez me sentía en confianza con ella desde que terminamos.

—Oye, yo... mañana estaré libre, no sé si te gustaría salir a tomar un café conmigo.— comentó ligeramente nerviosa

—Ah... claro, tendré el día libre.— acepté

Sonrió emocionada.

—¡T-te llamo mañana, ¿vale?!— dijo

Asentí.

—¡G-gracias!— besó ligeramente mi mejilla y sólo bajó nuevamente las escaleras

Yo sólo reí ligeramente y volví a lo mío, limpiar mis manos.

Aunque cuando volteé a verme al espejo, el labial de Tzuyu estaba marcado...

Recordé cómo se puso Chaeryeong hace rato, pero sólo saldré con Tzuyu como amigos y nada más, sé lo mucho que amo a Chaeryeong...

Pues sólo limpié mi mejilla y volví a bajar con las demás; me senté al lado de mi novia, quién estaba charlando con sus amigas. Me sonrió al verme sentarme a su lado, pero sólo seguimos con nuestra noche de amigos.

—¿Se quedan?, tenemos dos habitaciones libres.— comentó Jihyo

—Gracias, pero... ____ y yo dormimos juntos.— comentó Chaeryeong tímidamente

Sus mejillas se enrojecieron y se escondió en mi pecho.

—Pueden usar una habitación los dos, no nos molesta.— le dijo Jihyo

Chaeryeong y yo nos miramos. Yo hacia lo que ella quisiera, si no quería, no nos quedamos, si quiere, nos quedamos.

Asintió ligeramente, así que aceptamos quedarnos a dormir.

Aunque no teníamos una ropa más cómoda para dormir, ambos decidimos hacerlo sólo en ropa interior.

—¿Amor?— susurró

—Dime.— me acerqué ligeramente más a ella

—¿Crees que nos escuchen si lo hacemos aquí?— preguntó

Me reí y acaricié ligeramente su mano.

—No lo sé, las paredes parecen bastante sólidas, aunque gimes bastante fuerte.— susurré yo

—¡Amor!— golpeó ligeramente mi pecho

Yo sólo me reí.

Besé suavemente sus labios mientras reíamos, en un principio eran besos suaves, después ligeramente más largos, y después muchísimo más salvajes e intensos. Usábamos nuestras lenguas, mordiamos nuestros labios, también pasamos a las caricias.

Un chico en TWICEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora