Capítulo 93

478 43 1
                                    

—¿Qué se te apetece, mi amor?, ¿te he llamado mi amor alguna vez?— pregunté de lo más tranquilo

—¿Además de estando en la cama?, mmm... creo que no, pero me gusta, mi amor.— me robó una papá frita y sonrió se la manera más hermosa posible

Le sonreí de vuelta y yo le robé un beso.

—Ah... ¿te parece comer bossam?— propuso

—Vale. Me gusta.— acepté

Sonrió, así que nos fuimos rápidamente a comprar todos los ingredientes.

—Mi amor, ¿te parece si compro esto?— pregunté, sosteniendo la botella de soju en mi mano

—Me encanta que me llames así.— me abrazó por la espalda —Pero no digiero bien el alcohol, cariño.— dije

—Lo llevaremos, ¿te parece?— pregunté

Asintió.

Nos aseguramos de que nadie nos veía y aprovechamos para besarnos.

Así que solamente pasamos a caja y pagamos todo para finalmente llegar a mi departamento.

Chaeryeong entró primero y justo después lo hice yo, aunque no la dejé alejarse, si no que la tomé de la cintura y la acerqué a mí, haciéndola reír.

Deslicé mis manos por su abdomen y comencé a besarla.

—Me gustas mucho.— dijo

—Y tú a mí. Me gustas muchísimo, Chaeryeong, muchísimo de verdad...— sonreí mientras me iba acercando lentamente a sus labios

—Voy a encender la estufa, ¿vienes?— preguntó

Asentí, así que nos acercamos juntos a la cocina.

Dejó su bolso en el sofá mientras que yo iba sacando los sartenes y después se acercó a mí para empezar a cocinar.

Cortó la lechuga mientras que yo preparaba y empezaba a cocinar la carne.

—¿Algo para beber?— pregunté viendo en mi refrigerador

—Agua está bien.— sonrió

Llené el vaso y se lo di, cosa que hice para mí también.

Así que tras una divertida cocina junto a mi novia llena de risas, besos, caricias y música, pues nos dispusimos a cenar.

—Bebé...— Chaeryeong se puso seria

—Dime, preciosa.— limpié mis labios

—Es... ma-mañana tendré que irme. Nos iremos a los Estados Unidos para grabar nuestro video músical.— comentó

—¿De verdad?, ¿y... y cuando van a volver?— pregunté obviamente triste

—En una semana.— hizo un puchero —No me quiero separar de ti.— dijo

—Está bien.— tomé su mano y la acaricié

Un chico en TWICEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora