Capítulo cuarenta y uno

180 14 0
                                    

Salgo del baño con el cabello envuelto en una toalla, si mi peluquero me viera ahora mismo me mataría. Estoy preparándome para salir con Elián y Celline, vamos a ir a comer a un restaurante y después al cine. Hacía tiempo que no tenía un plan de estos, estoy relajada y voy a salir con mis amigos.

Miro a Ethan, ha roto con Dominick y ha discutido con Eva. Se ha cansado de que lo usen y no lo culpo, ha estado en medio de una situación que lo ha embaucado. Él pensaba que por fin estaba siendo él mismo, se ha dado cuenta de que estaban utilizándolo y en estos momentos se está percatando de lo que duele el no ser uno mismo.

Los troglos se han ido, están en Los Ángeles y solo vendrán a la graduación. Era más fácil para Avery así, se enamoró de mí el día de su graduación en el instituto. Ahora ha roto conmigo justo antes de su graduación en la universidad. De nuevo, está cerrando etapas; pero yo no soy quien está a su lado.

La semana que viene será el juicio, solo quedan seis días para que llegue.

—Odio esta vida —musita desde el sofá.

Se le ve enfadado —el amor es así, a veces se gana y a veces se pierde. Pero cuando se pierde, se lleva algo de ti.

—Te oí llorar anoche, no quise molestarte. Estoy preocupado —eleva la cara hacia mí y me mira desde abajo.

—Bueno, como dije, he perdido algo de mí misma —digo en un susurro. Apenas tengo fuerzas para hablar.

—Debiste esperar —se gira y se sienta mirando hacia mi dirección—. Tras pensarlo mucho, bueno, ibas a dejarlo de todas formas. No sé, quizá debiste ser un poco más egoísta y haberle robado tiempo al amor.

Sul última frase me causa gracia, no me imaginaba a Mini Ford hablando así.

—Solo le habría causado más dolor a Avery. Cuando se vaya, estará totalmente recuperado y tendrá fuerzas para afrontar aquello que se le interponga en el camino —resoplo—. No sé, todo esto nos llevó a romper. Por lo menos no hemos acabado a palos.

—Lástima, no eras tan mala cuñada como esperaba —agarra el móvil—. Avery está en la mierda, solo para que lo sepas.

Siento la presión nacer en mi pecho, sé que lo dice porque en el fondo está enfadado conmigo. Su hermano le importa mucho, a pesar de todo lo que haya pasado entre ellos, siguen apoyándose como el primer día. Aunque las cosas están tensas y no hablan mucho porque cada vez que lo hacen acaba saliendo el tema de la empresa.

No he dejado de pensar en él desde la última vez que nos vimos. Hemos seguido hablando, él sigue preocupado por el juicio y junto con mi hermano está intentando convencerme de la estupidez que es querer ver a Hunter. No creo que nunca lleguen a entender mis motivos, es complicado si no has pasado por esto.

—Seguimos hablando —confieso, con la boca pequeña.

—Como si no lo supiera ya —pone los ojos en blanco—. No hay quien os entienda.

—Ethan, para mí no es fácil dejarlo ir. Yo quiero pasar el resto de mi vida a su lado, pero no puede ser —salgo corriendo del apartamento. Lo último que me falta es que se ponga a regañarme, ya sé que lo he hecho mal. 

¿Qué forma había de hacerlo bien? Ninguno de los dos quería separarse del otro.

***

Por fin tengo mi coche aquí, es una de las pocas cosas que necesitaba recuperar antes del juicio. Con él viene la confianza que perdí hace un año, no creo que no pueda considerarse como mérito haberme podido poner al volante.

Nosotros [#2] (COMPLETA)✓ (Pronombres Que Terminan En Mi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora