Intercambio [AePete/ AeTor]

Tres

—Me... —Pete sentía como las opresión en sus vías respiratorias y eso le dificultaba hablar—. me... —era imposible. Intentó ir al grano—. Bolso... —logró decir—. Ae... aler... gia —finalmente formuló lo que estaba pasándole. Vio al esposo de su gemelo palidecer después de entender lo que sucedía. Estaba sufriendo anafilaxia y Pete estaba diciéndole que la inyección que siempre lleva encima estaba en su bolso, arriba en el dormitorio.

—¿Qué bolso? —preguntó Ae desesperado, pero Pete no podía responderle—. ¿En qué bolso? Tor...

¿Por qué la comida tenia condimentos? Tutor también era alérgico a los condimentos, en especial los picantes ¿Por qué en su casa le pondrían tales especias cuando era alérgico?

Pete en verdad quería decirle a Ae en qué bolso, pero estaba teniendo dificultades para respirar. La inflamación en su garganta aumentaba. Ae empezó a gritar hasta que una de las empleadas apareció.

—Lin —la llamó Ae—, vigila que Tor siga respirando. Iré por la inyección. Si deja de respirar o se desmaya llama de inmediato a urgencias. —Ae dio las instrucciones subiendo las escaleras.

Pete sentía que perdería el conocimiento en cualquier momento. Su garganta estaba terriblemente inflamada, pero entonces sintió un pinchazo y unas manos acariciando su rostro. Logró mantenerse consciente y poco a poco fue sintiendo como el aire ingresaba con normalidad.

—Ae... —logró decir con alivio—. ¿Por qué la comida tenia...? —preguntó despacio, con los ojos llenos de lágrimas.

—Quiero saber lo mismo ¿Lin?

Lin bajó la mirada y empezó a temblar.

—Yo, yo no cocine. Llamaré a Nim.

Nim contó muy asustada que no lo había hecho con intenciones, sino que jamás pensó que Tutor se quedaría a cenar.

—Teníamos todo ya preparado para cuando llegaron y al momento de servir la cena se me olvidó el detalle.

Pete no podía culparla. Sintió pena por ella y dolor porque todos pensaban que es lo que haría: no quedarse en casa. Nadie pensaba lo contrario. Pero Ae impartió su autoridad.

—Jamás dije que en su ausencia podían condimentar. No se usa, punto ¿Han entendido?

—Sí, señor —Dijeron ambas empleadas

—¿Tor? —Le preguntó Ae.

—Estoy bien. La inyección ya actuó. Gracias una vez más. Yo... bueno, hoy no sé que hubiera hecho sin tu ayuda.

—¿Iras a la empresa?

—Me están esperando.

—¿Quieres que te lleve? Puedo ir a buscarte cuando termines.

—Supongo que es buena idea.

Ae asintió y lo ayudó para cerciorarse que podía caminar. Tutor no se había equivocado. Ae no era malo.

***

Pete notó que Trump, el compañero de Tutor, era más alto de lo que se veía en la foto que su gemelo le había mostrado. Sin embargo, no le pareció tan serio, de hecho, al verlo, una sonrisa traviesa se mostró en su rostro, pero Pete tuvo de inmediato mal presentimiento.

—Tor —casi gritó Trump—. ¿Me extrañaste? —se acercó demasiado por lo que Pete retrocedió unos pasos y miró alrededor: No había nadie.

—¿Dónde están los demás? —preguntó con un mal presentimiento creciendo en su interior.

—Ah, eso —Trump siguió avanzando y Pete retrocediendo hasta que su espalda chocó contra la pared de la oficina—. Retrasé la reunión una hora. Espero que no te moleste.