Lucius

70 5 0
                                    

Su sangre era pura, su magia era fuerte, era atractivo, con ese cabello rubio platinado cayendo en rizos hasta sus hombros, sus ojos como plata líquida devolviendo frívolamente una mirada, su voz grave, áspera, calmada, su expresión imperturbable que parecía ser requisito para estar en Slytherin.

Si tuviera que calificar su vida del uno al 10 se quedaría meditándolo por varios días, aunque muchas cosas fueron horribles, ciertos momentos fueron hermosos, como esos cuando sentía la calidez de cierto chico de lentes contra su cuerpo, cuando Cissy iniciaba una batalla de cosquillas tras estar a nada de ganarle en ajedrez mágico, cuando tomaba unas copas de whisky de fuego simulando ser sólo jugo, sentado recargado en una pared en algún lugar de Hogwarts que había descubierto junto a Gwyllion y Severus, con quien en esos momentos se encontraba y mientras bebían disfrutaban de una agradable charla, olvidando por un momento quienes eran y cual era su destino ya escrito desde el día de su nacimiento.

Nunca sabría como definir su vida, ni siquiera después, junto a su querida amiga y esposa, y su adorado hijo.

━═━═━═━═━═━═━═━═━

En su mente repasaba los sucesos una y otra vez

Esa noche, después, unos días de miradas indiscretas, una fiesta a la que asistiría por obligación de su amiga, y después, a él, su querido Potter, pronunciando un hechizo con el que salió disparado al sofá donde una pareja se besuqueaba.

Y ahora, tenía pendiente varios castigos.

No entendía por que lo había atacado de esa manera.

Pero aún así, a pesar de todo, por su cabeza no dejaba de pasar la noche.

Y es que, ¿cómo iba a olvidarla?

¿Cómo olvidaría una de las mejores noches de su vida? Piel, contra piel, sudados, acariciándose cada zona del cuerpo, besando una vena saltante en su cuello, sus lentes empañados, sus mejillas sonrojadas, sus labios entreabiertos soltando suspiros y dulces, pero bajos, gemidos, su cabello más salvaje que nunca, sus manos enterradas en sus cabellos rubios, mientras que él pasea una mano por su tonificado pecho perlado en sudor, se inclina para lamerlo. Y entonces, los recuerdos comienzan a volverse borrosos, no oye más que su propio tono desesperado, y de él pidiendo por más.

Sale de su trance respirando con dificultad, y entonces se da cuenta que lleva rato revolviendo su comida

—Estúpidas comidas raras y extravagantes —. Extraña la noche en que escapó con sus dos almas más cercanas a la cocina por comida, nadie se enteró, y eso fue lo mejor.

Disfruta con todo su corazón cada día, noche o minuto que tiene para ser libre, para no ser el cruel mago sangre pura que su padre esperaba y que todos veían en él. Y aún así sentía que no lo aprovechaba al máximo.

Tan solo quisiera haber tenido más tiempo para quedarse a su lado.

━═━═━═━═━═━═━═━═━

Creo que mi historia realmente es más como un desahogo, para todos aquellos que sufrieron con el final de los merodeadores, para mí que me interesa ver un Lucius bueno, y un Snape que no esté obsesionado con Lily hasta el final, para todos aquellos que quieren ver cumplirse sus parejas, por eso escribo esto. Espero logre mi cometido.

The heart knows, the mind don'tDonde viven las historias. Descúbrelo ahora