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Narrador omnisciente

La Alfa y la Omega caminaron en silencio hasta llegar a su habitación. El ambiente era muy tenso. Lisa estaba ordenando sus ideas, intentando encontrar una forma para que Jennie la perdonará.

- bueno ahora comienza- dijo la más baja.

- Sabes yo nunca planee esto- suspiró.

- oh claro,porque si lo hubieras planeado hubiera salido perfecto- hablo sarcásticamente.

- no quise decir eso Jennie, jamás espere que todo esto pasará... Se que te mentí, te debí haber dicho que era Alfa pero entiéndeme, yo no podía decirle a nadie.....ante todos en la universidad soy Omega en eso quedé con mis padres y todo por un error- dijo mientras tronaba sus dedos por sus nervios.

- está bien.... Entiendo eso pero si sabías que eras Alfa porque no le dijiste a Rosé que me llevará esa noche a casa, debiste buscar la manera, yo estaba en celo y además borracha- reprochó la castaña.

- Lose pero en ese momento te quería sacar de ahí, si yo no te hubiera sacado, Irene se hubiera aprovechado de ti..- no acabo de hablar porque la castaña la volvió a interrumpir.

- eso no fue lo que hiciste, ¿tú?- dijo con enojo la Omega.

- NO! por dios Jennie, ese día me comporté contigo, trate de controlarme... te deje en tú cama pero al rato tú te metiste a la mía, yo trate te lo juro, trate de no caer pero lo hice fui débil, lo lamento- sollozó.

La castaña vió a la pelinegra romper en llanto, quiso acercarse pero no lo hizo, aún no podía perdonar la por todo.

- creo que lo mejor es interrumpir el embarazo- dijo y se sorprendió por sus palabras.

- ¿Que mierda estás diciendo Jennie?- la alfa se sintió herida, decepcionada.

- yo...yo creo que es lo mejor- murmuró la castaña.

- NO! El bebé no tiene la culpa de nada Jennie esto fue nuestra responsabilidad, si quieres culpar a alguien hazlo a mi, ódiame pero no le hagas daño al bebé por favor- suplicó la pelinegra.

- Lisa no puedo tener un bebé, tengo muchos sueños que cumplir, mis padres se esforzaron por mi educación, claro tu no puedes entenderlo por qué siempre has tenido todo, pero YO sufrí por todo, tenía que ver a mis padres trabajar día y noche! No puedo fallarles- alzo la voz Jennie.

- Estás siendo cruel y lo sabes- se limpio las lágrimas.

- estoy siendo realista Lisa- la miró a los ojos.

- Jennie por favor- se arrodilló.

Pov Jennie

Lisa estaba arrodilla al lado del sofá, suplicando que cambiará de parecer. Aún no creía haber dicho que abortaría por qué eso va en contra de mis propios principios. Me empezó a doler la cabeza. Lisa me estresaba, sus mentiras me hacían sentir tonta por haberle creído.

- Jennie no abortes, se que lo dices por el momento... Tu no serías capaz o ¿Si?- preguntó con un hilo de voz triste.

Suspiré.

Sin duda necesito un respiro de todo.

- vete Lisa no quiero hablar más de esto contigo.

- pero debes! No permitiré que hagas algo en contra del bebé- tomó mi muñeca.

- suéltame! Entiende que por ahora no quiero verte- me solté de su agarre.

Lisa trato de decir algo pero volvió a cerrar la boca, suspiró derrotada caminó hasta sacar una mochila de abajo de su cama. La vi sacar unas cuantas mudas de ropa, metió su celular y empezó a poner sus zapatillas. Ella estaba molesta aunque su expresión era neutra podía observar como cerraba sus manos en puños.

- te daré tu espacio se que lo necesitas.... solo te pido que no te deshagas de mi bebé, si no lo quieres- suspiró- si no lo quieres entonces dámelo a mi, yo me encargaré de que te permitan volver a la universidad, prometo hablar con los directivos decirles que yo tuve la culpa y tú volverás después de dar a luz- voltio mirandome fijamente.

Yo agache la mirada.

- hablaré con Rosé, si me necesitas háblale a ella, adiós- abrió la puerta y se fue cerrándola de golpe.

Una vez que se fue, me permití quebrarme a llorar, me encogí en lo sofá, apreté mis rodillas con mis brazos.

Todo va estar bien.

Pase lo que pase todo iba a estar bien.

Traté de convencerme, sin darme cuenta me dormí.

Pov Lisa

Azote la puerta.

Me senté en el frío piso y rompí en llanto. Jennie quería abortar y yo necesitaba que ella cambiará de idea, se que es su cuerpo y que ella no pidió embarazarse y ser obligada a ser madre, pero el bebé. Nuestro hijo merecía vivir, el no tenía la culpa de nada. Soy plenamente conciente que yo tuve el error desde el principio. Debí haberle dicho que era Alfa, tal vez así Jennie hubiera tomado la pastilla del día siguiente, pero las cosas ya estaban hechas.

Maldición.

Recogí mi mochila del suelo y me la puse en el hombro. Por ahora necesito buscar un lugar donde quedarme. Agarre mi celular y marqué a la primera persona que se me vino a la mente.

Tres timbres bastaron para que me contestará.

- ey Rosie! necesito un favor- fui directamente al grano. Se que Rosé últimamente está más pegada a Jennie y se que debe odiarme ahora mismo.

-pues ven a mi cuarto, facultad de Arte, tercer edificio, piso 5, habitación 3- dijo y colgó.

Bueno un peso menos de encima, suspiré pesadamente y me dirigí hacia Rosé.

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Volví :3

Stanford- Jenlisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora