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Narrador omnisciente

La pelimorada se encontraba feliz por haber ayudado a la que ahora consideraba su amiga. Sin duda el problema que enfrentaban su amiga era muy difícil pero sabía muy bien que la decisión la debía tomar Jennie y que Lisa solo la tenía que apoyar.

- Jisoo ya llegué- dijo Rosé entrando por la puerta.

La rubia estaba empapada pero mantenía secos sus libros en su mochila impermeable.

- Rosie ve a bañarte te vas a enfermar- tomo la mano de la Omega llevándola al baño.

- está bien- la rubia cerró la puerta del baño.

Se empezó a desvestir y se relajo al sentir el agua caliente caer por todo su cuerpo. Por otro lado la alfa estaba muy nerviosa, su lobo estaba como loco quería entrar y hacer suya a la Omega.

Maldito instintos se dijo a si misma.

Alrededor de 15minutos salió la Omega envuelta en una toalla pequeña, que dejaba muy poco a su imaginación.

-mmm creo que yo...yo debería irme- dijo la alfa caminando hasta chocar con la puerta.

- no, quédate- se acercó la Omega hasta quedar frente a frente con la alfa.

- Rosie alejate, yo...yo no podré controlarme mucho es mejor que..- no acabó de hablar y fue callada por los labios de la contraria.

El beso era necesitado, salvaje. Sin pensarlo mucho Jisoo correspondió al mismo ritmo que la Omega sus lenguas peleaban por el control.

La pelimorada no pudo aguantar más y alzó a la rubia por las piernas y está las rodeo en su cadera.
Jisoo apretó el trasero de Rosé causando que gimiera en su boca.

- oh Ro~sie última oportunidad para que te alejes- jadeo la alfa.

Rosé solo volvió a besarla con más intensidad.

- te lo advertí- dijo firmemente mientras la llevaba hasta la cama.

La alfa quitó la toalla dejando a la Omega desnuda en la cama, se exito más al ver lo lubricada que estaba. El bulto en sus pantalones era más evidente.

La Omega desesperada empezó a tratar de sacarle la ropa a la alfa. Cuando por fin la dejo solo el boxer , se subió en su regazo y la besó con lujuria.

Jisoo beso el cuello y clavículas de Rosé, una de sus manos bajo a la entre pierna de la Omega, causando que está gimiera en su oído. La alfa la recostó en la cama y empezó a besar los senos de la más pequeña, beso y con su otra mano masajeó uno de sus senos.

Fue descendiendo sus besos desde el cuello hasta la entrepierna de la rubia. Rosé cerro los ojos al sentir a Jisoo embestirla con su lengua.

- oh Jisoo, dios eres una diosa- gimió.

La nombrada embistió más rápido hasta sentir como se vino la Omega, sin más lamió todo.

-ya estás lista para mí, cariño- jadeó.

Se sacó la última prenda que quedaba entre ellas, dejando a ver su gran miembro. Pero antes de entrar en ella se acordó del preservativo.

Mierda

Se bajó de la cama, sorprendiendo a la Omega que se iba a quejar pero al ver que la alfa sacaba un condón de su pantalón sonrió felizmente porque la pelimorada la cuidaba.

- lo siento por matar el momento pero no queremos errores más adelante- sonrió.

- si lo entiendo- asintió Rosé.

- ey no digo que no quiero tener bebés contigo pero aún no es el momento Rosie y quiero cuidar de ti y de todos tus sueños, en un futuro espero que tu seas la madre de mis cachorros- aclaró la más alta.

Rosé no pudo sentirse más feliz, la alfa la estaba aceptando como futura madre de sus cachorros, sin duda ya se había ganado su corazón. Sin pensarlo se lanzó sobre la Alfa, besándola con urgencia.

Jisoo la volvió a recostar, beso su cuello y dejo marcas en todo su pecho. Saco el condón y se lo puso.

-sere cuidadosa- hablo la alfa, sabía que era la primera vez de su Omega.

Beso sus labios mientras entraba en ella. Rosé gimió sintió un poco de dolor pero luego de unos minutos le dió una señal para que la alfa se empezará a mover.

-oh Dios rosie eres...eres tan apretada- jadeó.

- más rápido Ji~soo- gimió.

La alfa empezó a aumentar sus embestidas, agarro fuertemente la cadera de la Omega para poder acelerar y embestirla mejor. La Omega gemía fuertemente, sus cuerpos estaban sudados y toda la habitación estaba llena de feromonas.

Jisoo quería marcarla pero se aguanto, gimió el nombre de Rosé mientras se venía y la nombrada gritó su nombre cuando llegó a su orgasmo.

Su cuerpo callo rendido en la cama y jalo a la Omega dejándola sobre su pecho.

- te quiero Rosie- dijo Jisoo.

- yo también- murmuró mientras cerraba sus ojos.

Sin duda hoy había Sido un gran día para la pelimorada.

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😃

Stanford- Jenlisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora