Stanford- Jenlisa G!P

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Narrador omnisciente

El día no había comenzado nada bien para la pelinegra Alfa. Sus emociones se encontraban echas un lío, sus pensamientos eran un remolino. Era cierto ella nunca se tuvo que preocupar por mucho en su vida siempre tuvo lo que quería y la castaña, aquella Omega que alborotaba sus sentidos tenía razón, no estaban listas, pero abortar era algo tan extremo según sus principios.

Siguió caminando tratando de poder estabilizar sus sentidos. Sin darse cuenta ya estaba frente a la puerta de su rubia amiga. Tocó 3 veces el timbre hasta que la puerta se abrió.

- hola lisa- saludo Jisoo.

- hola, Jisoo¿cierto?- preguntó con duda.

La contraria asintió y se hizo a un lado para darle pase.

- bueno Rosie salió a recoger un libro de la biblioteca tardará un poco pero puedes sentarte y la esperamos hasta que llegué- sonrió la pelimorada.

- está bien- suspiró Lisa.

El ambiente no era uno tenso pero tampoco agradable. Lisa pensó que la otra Alfa era muy buena y le agrado de inmediato.

- no es por ser chismosa ni nada....solo quiero saber ¿cómo quedaste con Jennie?- preguntó nerviosa Jisoo.

Lisa la miró fijamente con el ceño fruncido, suspiró y aclaro su garganta.

- no quedamos como quería.....ella quiere abortar- dijo con un nudo en la garganta, trató de no romperse a llorar.

La pelimorada quedó en shock, no esperaba esa respuesta y más cuando se trata de Jennie, una Omega tan buena estaba segura que sus principios no aceptaban la idea del aborto.

- no se que decir- entre cerro los ojos- Jennie es alguien que no sería capaz de hacer algo como eso- frunció el ceño.

- pues lo dijo, me duele mucho pensar que quiere abortar- apretó sus manos.

- pero es algo que ella tiene que decidir- hablo Jisoo.

- ¿Que? Enserio estás apoyando eso! Dime lo aceptarías si estuvieras en mi lugar!- alzo la voz.

- claro que no lo aceptaría, pero es el cuerpo de Jennie y Lisa debes entender que tú prácticamente quieres obligarla a ser madre cosa que no está lista y mucho menos lo desea.... Ponte en su lugar Lisa, ella a sufrido mucho y esto también le afecta ,en vez de discutir con ella ponte bien los pantalones y en vez de reprocharle debes apoyarla con la decisión que tome, porque sea lo que sea que decida será difícil para ella- palmeo el hombro de Lisa.

- yo....yo fui una imbécil con ella- rompió a llorar la pelinegra.

- shhh no es tú culpa- la abrazó.

- ahora dime ¿porque viniste?- dijo intentando cambiar el tema.

- me fui....no soportaba escucharla decir eso y la dejé..... Oh por dios Jisoo soy una estúpida- volvió a llorar.

- entonces mujer anda!! Ve y pídele perdón- dijo dándole ánimos.

- gracias Jisoo, gracias- la abrazó y salió corriendo de ahí.

- wau soy muy buena en esto, debería ser psicóloga- se eligió la pelimorada.

(...)

Las gotas caían por doquier. La pequeña Omega castaña, sollozaba silenciosamente en el sofá, ya hace media hora que se había levantado eran las 5p.m y el ruido de unos truenos la hizo levantar de golpe.

No había almorzado, no tenía apetito y su cabeza dolía un montón, lisa se había ido hace horas. Se sentía sola en esa habitación, su loba se sentía herida, abandonada. Los truenos volvieron a sonar más fuerte causando que se exaltara, asustada caminó hasta meterse en la cama de la alfa, inhalando el aroma que aún conservaba la cama de Lisa pudo por fin relajarse.

El ruido de la puerta al abrirse la hizo sentarse en la cama, trató de calmar su acelerado corazón hasta que la vió. Lisa Manobal está ahí, la misma Lisa que se había ido dejándola sola, herida, desconsolada hace horas. La alfa estaba empapada tenía aún su mochila con la que salió y un par de bolsas en las manos.

- ¿ya has comido?- preguntó la alfa.

La castaña negó con su cabeza

- pero es tarde, no debes saltarte las comidas- dijo caminando hasta la cocina, sacó la comida de las bolsas y lo sirvió en dos platos para ella y la Omega.

Por otro lado la Omega observaba detenidamente cada acción que realizaba la alfa, sintió a su loba revolotear de felicidad, sin darse cuenta empezó a desprender sus feromonas que fueron captadas por la alfa que no pudo evitar sonreír al saber lo feliz que estaba la Omega.

- ten debes comer muy bien- le sonrió Lisa extendiendo una bandeja con un plato de kimchi.

- gracias- sonrió de lado Jennie.

Lisa no dejo que Jennie hiciera ningún esfuerzo así que le dió de comer, cosa que causo que la castaña se sonrojara con cada bocado que daba.

- lo puedo hacer sola- dijo con la boca aún llena.

- quiero hacerlo así que no protestes- hablo Lisa.

La castaña no dijo más y siguió comiendo, deleitándose con el kimchi. Cuando por fin acabaron de comer, Lisa pensó que era el momento de hablar con Jennie.

- ey Jennie..- la nombrada la interrumpió, poniendo una mano en su boca.

- estás mojada te vas a enfermar, ve a cambiarte y después hablamos- dijo Jennie.

Asintió y se fue a cambiar

(...)

En el baño Lisa trataba de encontrar la fuerza para aceptar la decisión que tomara Jennie.

Es su cuerpo ella decide. Se lo repitió muchas veces en la cabeza.

Acabo de ducharse y se puso su pijama. Respiró profundamente antes de salir del baño. Se sentó en la pateadera de su cama y miró a Jennie.

- yo quería pedirte disculpas, no debí reaccionar así...es tu cuerpo Jennie y sea lo que decidas lo aceptaré aún así la decisión me parta el corazón- agarro las manos de la castaña.

- prometo apoyarte Jennie, en todo desde hoy y siempre- mordió su labio para no romperse a llorar.

Jennie sin embargo sollozó,cosa que causo la culpa en el corazón de Lisa. La alfa no dudo y se acercó abrazando a la castaña, desprendió sus feromonas por toda la habitación para que la Omega se tranquilizara.

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Gracias por leer <3