Rooftops (Traducción)

capítulo 50 ~ toque

- lenguaje maduro

George pov

Me paso 5 horas sentado en la sala de espera de un hospital sin hacer absolutamente nada.

No hay nada que me distraiga, así que me quedo con mis pensamientos.

Si tarda tanto, no puede ser bueno, ¿verdad?

O quizás eso signifique que es algo bueno, quizás signifique que tienen todo bajo control.

Los carros y las enfermeras pasan de vez en cuando, pero ninguno de ellos me dedica un segundo pensamiento. Todos parecen ocupados, como si tuvieran que estar en otro sitio.

No sé en qué planta estoy, pero estoy seguro de que es la más alta. Los pasillos de aquí arriba son silenciosos, y estoy más que agradecido por ello. Es exactamente lo que necesito ahora.

Lo sostuve hasta que la ambulancia llegó a nosotros, e incluso entonces no me sentí bien al dejar su lado.

Tuve que mentir a los paramédicos, de lo contrario no me habrían dejado ir en la ambulancia, así que creen que soy el hermano de Dream.

Las palabras se sentían raras al salir de mi boca, y realmente no nos parecemos en nada.

Pero nadie se dio cuenta, así que creo que estoy bien por ahora.

Está oscuro, pero sé que pronto amanecerá. Wilbur y los demás se van a preocupar si no llamo pronto, pero no me atrevo a coger el teléfono y llamar.

Todavía siento que todo esto es culpa mía, todavía me siento culpable por lo que ha pasado.

Hay todo tipo de ruidos pequeños que suben y bajan por los pasillos, pero me acostumbro a ellos después de la segunda hora.

Sin embargo, parece que se reducen a medida que avanza la noche.

"¡Hola! George, ¿no es así? "

Levanto la vista y veo la cara de un hombre joven que me sonríe desde la puerta de la sala de espera. Parece acogedor y amable.

"Sí, lo es", respondo, intentando devolverle una pequeña sonrisa.

"Encantador, ¿y estás aquí con Clay, si no me equivoco? "

Le miro confuso, a punto de corregirle. Pero entonces recuerdo que en realidad tiene razón.

"Sí, estoy aquí", asiento, "¿cómo está? "

"Salió de la operación hace una hora", me dice, "pero queremos que se quede aquí un poco más hasta que se despierte para asegurarnos de que va a estar bien "

"Entonces, ¿está bien? ¿Se va a poner bien? "

"El hombre sonríe, levantando la vista de su pizarra.

Dejo escapar un largo suspiro, sintiendo que la tranquilidad me invade.

"¿Puedo verlo? Pregunto, preparándome para levantarme.

"Todavía está durmiendo, pero si todavía quieres...", dice, poniéndose de pie tras apoyarse en el marco de la puerta.

"Sí, sí quiero", me apresuro a decir, poniéndome de pie y siguiendo al hombre por el largo pasillo beige.

Nos lleva a los dos a un ascensor y subimos otros tres pisos.

Aquí arriba es aún más tranquilo que donde estaba. También es mucho más abierto, con más ventanas y gente.

El hombre asiente con la cabeza y saluda entre dientes a otros médicos y enfermeras que pasan por allí, e incluso se detiene a charlar con algunos de ellos. Me da tiempo para mirar a mi alrededor, para asimilarlo todo.