Mi Sexy Hermanastro ( En Edición)

capitulo 14- nueva temporada

Me desperté porque me dolía todo el cuerpo, me había quedado dormida junto a Thoma apoyados en mi pared.  Lo miré,  miré cada rasgo de su rostro, era realmente hermoso, esas pequeñas pecas en su nariz que solo se pueden ver si estas a centímetros de su carita, esos labios rosas que con solo tocar cualquier parte de mi cuerpo, erizan mi piel.  Este hombre me estaba volviendo loca.

- Me odiaras cuando me vaya a Londres.- acaricie su rostro, lleve mi mano a su pelo y la enrede ahi.- pero debo irme, mi futuro depende de mi, te extrañaré como no te das una idea. - las lágrimas empezaron a brotar por mis ojos,  iba a extrañar a este ser odioso que cambió mi vida.

Me levante y sentí como su mano tironeaba de mi pierna, haciéndome caer encima de él.

Me miró con un profundo dolor en sus ojos,  sentí como mi corazón se encogía. - te iras, no puedo detenerte, es tu futuro princesa, mereces conseguirlo todo.- su mano acaricio mi muslo.- te apoyare en todas las decisiones que tomes,  estarán perfectas para mi. - una sonrisa de costado apareció en su rostro. - pero no puedes impedir que me vaya contigo. - bajo la cabeza, sentí como su voz tembló en ese momento.

-¿A-A que te refieres?- me senté mejor sobre sus piernas, sus manos volaron a mi trasero y lo apretaron.

-Solicite una Beca por deporte y me la aceptaron.- sus manos agarraron de mis caderas y comenzó a moverme despacio sobre su miembro que ya se podía sentir duro.

-Maldita sea Thomy, no se que me excita más, si la idea de estar contigo en Londres o tu miembro rozando mi sexo.- una sonora carcajada salio de lo más profundo de su garganta. Provocando que nuestros cuerpos se muevan y se sigan rozando nuestros sexos.- tengo ganas de que me folles bien duro en este momento Thommy.

No termine de decir aquello que aquel muchacho ya me tenía acorralada en la cama, me fue sacando prenda por prenda hasta quedar solo en ropa interior. Su mirada lujuriosa recorría cada centímetro de mi piel, acompañada del tacto de su mano.

-Te necesito pequeña, necesito tu perfecto y húmedo sexo en mi boca.- un pequeño gemido se escapo de mi boca.- sabes tan rico.

Su boca en hundió en mi sexo y empecé a temblar de extasis, este chico iba a matarme.

Empuje su cabeza con mis manos y apreté mis piernas, queriendo más, necesitando más de él.

-Sigue, no pares.- acompañaba sus movimientos con mi cadera, profundizando todo.

Saco su boca de donde estaba, comenzó a darme besos por mis muslos, subiendo por mi panza hasta llegar a mis pechos, jugo con mis pezones, los mordió, chupo, apretó y de un momento a otro tenía su miembro dentro mío.

No podía dejar de gemir de lo placentero que era todo, este hombre sí que sabía moverse. Quería más y más

-Thom, más fuerte, follame como tu solo sabes hacer.- rasguñe su espalda, apreté mi coño para que sintiera un poco más de placer y de un momento a otro me había cambiado de posición. Ahora yo me encontraba arriba suyo.

Saltaba y mis pechos se movían al compás de mis movimientos, con sus manos en mis caderas ayudaba a mis movimientos, para que fueran más bruscos y rápidos.

-Em me va a explotar la polla de lo bien que lo hacesmujer, era una droga, no puedo cansarme del sexo contigo.- tiro su cabeza hacia atrás y dejo que tome el control de la situación.

Llego a su clímax, me baje de él.- siéntate.- le ordene.

Me puse en frente suyo y empecé a tocarme,  cada parte de mi cuerpo, jugué con mis pechos, seguí bajando por mi abdomen, hasta llegar a mi palpitante coño, comencé con pequeños y suaves círculos por encima de mi clitoris, la velocidad aumentaba a medida que veía como su miembro si iba poniendo duro nuevamente.

-pequeña pervertida quieres otra ronda.- comenzó a tocarse el miembro con movimientos verticales, subía y bajaba su mano por todo su largo, ver eso me excitaba más. Ya estaba por llegar a mi clímax.

-Me vuelves loca Thommy.- llegué al clímax y caí de rodillas al piso, las piernas me temblaban y cuerpo tenía espasmos de lo bien que la había pasado.- iré a ducharme, tu iras después.

Ya en la ducha enjabone cada parte de mi cuerpo para sacar rastros de sudor y fluidos. La ducha fue relajante.

Salí me coloque ropa cómoda y le deje el baño a Thom.

Él tardo más en bañarse, cuando salió lo hizo con una toalla amarrada a su cintura, su cuerpo mojado volvía a excitarme, este hombre quiere volver loco a mi coño.

-Ya le has contado a mis tíos que te iras a Londres.- se tiro en mi cama, justo al lado mío, me miró.

-Hoy pensaba decírselo en ma cena.- lo abrace por el abdomen, olía tan rico, me sentía tan cómoda entre sus brazos, me daba tanta paz que podía quedarme ahí toda mi vida.- eres mi lugar seguro Thom, esta paz que siento al abrazarte nunca la sentí con nadie, eres especial en mi vida.- sentí como mis cachetes se iban poniendo de un color carmesí

Nunca había confesado tal cosa, abrir mis sentimientos de esa forma no estaba en mis planes, pero mi iría a Londres con el hombre de mi vida y eso me pone muy sentimental.

Acaricie su brazo, su abdomen, su pecho, hasta llegar a esa perfecta mandíbula, con la barba crecida de dos días, era perfecta, él era perfecto por donde lo mires.

-¿Te quedaras a cenar no?.- lo miré de costado. Él solo se limito a asentir con la cabeza.

-Todavía no hemos almorzado y ya piensas en la cena, ven pequeña, hagamos unas pastas.- salto de mi cama y yo salte tras de él. Contemplarlo se había vuelto uno de mis pasatiempos favoritos.

Nos adentramos en la cocina y nos pusimos a cocinar unas pastas caseras que él se encargo de hacer, yo hice la salsa y prepare la mesa.

Mis padres no se encontraban en casa, debían estar en el club, o almorzando con alguno de sus amigos.

La comida se paso entre charla, risas y grititos de ambos.

-Veamos una película Em.- Thommy tiro de mi mano después de que lavamos los trastes y nos tiramos en el sillón a ver una película, no se cuantos minutos habían pasado pero ya sentía mis ojos pesados, me apoye en su pecho y mis ojos se cerraron al instante.