capitulo 4

34.1K 1.2K 64
                                    

¿Por qué hoy? De verdad, no tengo ganas de salir. En realidad no tengo ganas de salir con mi "nueva familia" No. Corrección. No tengo ganas de salir con Max.

Vamos...se cree la gran cosa y solo...solo tiene un cuerpo sensual..y, ¿POR QUÉ TIENES PENSAMIENTOS DE ESE MODO CON ÉL? ES MAX, Sarah. REACCIONA.

Es tu nuevo hermanastro. El hijo de tu padrastro. El hijastro de tu progenitora. En realidad, nuestros padres no están casados y no lo estarán.

Eso es lo que tu quieres creer

¿Otra vez tu? No quiero hablar contigo

Reaccione de un momento a otro, y cuando lo hice, estaba sentada en mi gran cama. Me levanté y decidí seleccionar el vestido más fino para esta noche.

Elegí un vestido con un largo hasta un poco más arriba de la rodilla. La parte de arriba, la cual parecia un top, tenia lentejuelas negras y la parte de abajo, que formaba algo asi como una pollera, era blanca con tela de gasa. Era uno de mis favoritos. Lo usaba cada vez que tenia la oportunidad y esta, era una de esas veces. Y por ultimo para mis increibles pies me puse los tacones con taco aguja de 10cm. de color negros, con algunos detalles en dorado y dos broches de un lado, tambien en dorado. Estos tambien eran mis favoritos. No le tenia miedo a los tacos, estaba acostumbrada a ellos, no eran la cosa mas comoda del mundo, pero eran estéticos y quedaban muy bien.

Me maquille poco, tome un pequeño bolso el cual metí el movil y algo de dinero por ultimo mire el reloj y decidí bajar.

-Al fin- se escuchó una voz con un poco de aburrimiento y pesadez desde el living. ¿Max? ¿Qué hacia él aquí?
Me tomé algunos segundos en analizar su vestimenta. Tenia un saco de vestir bordo con un pantalón, también de vestir, del mismo color. Una camisa blanca. Impecable. Podía ver sus ojos como le resaltaban más de esa manera. Los zapatos...me dejaron sin respiro. Estaban perfectamente lustrados. Sin ninguna marca de nada. Quería pisarlos.  Eran negros con cordones. Eran elegantes e iban a la perfección con la vestimenta.

-Si...lo sé, me veo sexy...-dijo dando la vuelta el Señorito egocentrico. La habia cagado. Ese comentarios hizo que salgo de mi trance.

-¿Sabes? mejor cállate.-Largué mi aire contenido en los pulmones. Dándome por vencida.

-Pero tú, nena...tus piernas son exquisitas...-La sensualidad en su voz se hizo notoria, al igual que mis nervios. No. Saca esos nervios. Maldito idiota.

-Ugh, eres un..un cerdo...-No se me ocurrió otra palabra.

-Gracias, también te amo hermanita...-Me lanzo un beso al aire, guineando su ojo. Nervios, hoy no. Vamos, ayúdenme con esto.

-Bien -traté de cambiar la conversación rápidamente- ¿dónde esta mi madre?

-Se fue con mi padre. Dijeron que ellos se adelantaban y nos esperaban allá. -perfecto. Te agradezco muchísimo madre por dejarme con este sexy asno.

-¿Podemos irnos ya? -pregunte con irritación y desesperación. Quería llegar al restaurante lo más rápido posible. No quería estar cerca de Max. Sola. Los nervios me jugaban en contra la mayoría de las veces. Lo odiaba.

-Cuando tu quieras, preciosa. Si no, podemos..quedarnos por aquí, haciendo algunas cosas...- maldito perverdito, calentón de mujeres.

¿En serio, Max? ¿En serio?
Mis nervios ya comenzaban a notarse y...mierda.

-------------------------------------------------------------

Hola mis amores. Aqui otro capitulo editado. Ya saben lo que tienen que hacer.

Las amo y nos leemos en el proximo

Adios chiks!

Mi Sexy Hermanastro ( En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora