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[Percy]

—¡Es imposible! —exclamó Annie a mi lado—, ¡tú no deberías estar aquí! ¡Estas muerto!

—Es lo mismo que me pregunto, Annie —le respondió él. Ella se enojó.

—¡No vuelvas a llamarme Annie! ¡Peridte todo ese derecho el día en el que nos tracionaste!

—¡No tuve elección! ¡Tenía que hacer algo por aquellos que sufrimos, pero ustedes lo detuvieron! ¡Y tú! —me señaló con su espada—, ¡por tu culpa tuve que morir! ¡Me hice el héroe por ti y te quedaste con lo que más amaba!

—Pensé que habíamos quedado en buenas condiciones al haber tomado esa decisión, Luke.

—¡Pero morí!

—Técnicamente no estabas muerto —dije, él me miró furioso—, osea tu alma estaba viva, pero no tenías un cuerpo al cual regresar.

—Y no hicieron nada para hacerlo... Es genial, él tenía razón.

—¿De quién estas hablando? —pregunté.

Luke me miró y sonrió maliciosamente.

—Tártaro y te manda saludos... —levantó su espada y corrió hacia mí. Con Contracorriente empuñada, espere a que llegara y cuando lo hice lo detuve sin mucho esfuerzo—, parece que has mejorado, pero yo también tengo mis trucos.

Con su mano tomó mi muñeca izquierda y la apretó fuertemente, dejé salir un grito de dolor y caí de rodillas, tomándome la muñeca para calmar el dolor.

—Ya no eres tan fuerte, ¿eh Percy?

—Te... Te haré tragarte tus propias palabras, Luke.

—Eso estoy esperando, pero... ¿Podrás vencerme con tu mano lastimada? ¿Te das cuenta de que esa es la mano con la que mejor peleas? Sería un desperdicio de tiempo.

Se comenzó alejar de mi y buscó a su siguiente víctima.

—¡No des un paso más Luke! ¡Te lo advierto!

—Oh vamos Annie, solo quiero abrazarte y ya.

—Annabeth te dijo algo, apártate.

—Vamos Thals, no dispararas la flecha, no me harías daño. Se lo que sentias por mi, y lo sigues sintiendo.

—No es cierto, he cambiado y te he olvidado.

—No, por que tu brazo está temblando.

Y tenía razón, cuando me giré a verlos, Thalia tenía su arco preparado, pero la flecha que estaba en la cuerda no dejaba de moverse, no quería disparar.

—Voy a disparar, Luke.

—No lo harás —se acercó más a ella. Tomé todas las fuerzas que tenía guardada y me levanté, mi espada rozó su mejilla y éste se apartó de inmediato, estaba asustado.

—Ya te dijeron que te apartarás, Luke. Es mejor no provocar a Thalia. Aléjate.

Estaba enfrente de ambas con la espada en el aire y la punta con unas gotas de sangre, la sangre de Luke. Él tocó su mejilla con sus dedos y sonrió.

—Vaya... Si que estás enojado Percy... Bien, luego no digas que te lo advertí —hizo una pausa y sonrio—, pero... Haré algo para que nadie se interponga entre nosotros... ¡Ataquen!

Una horda de monstruos y zombies entraron al refugio, todos abrimos los ojos de par en par al ver lo que sucedía. No podía ser posible.

—¡Llevan a todos los mortales y niños hacia el bunker de seguridad ahora! —grité con todas mis fuerzas y pronto me hicieron caso. Ahora solo quedábamos los que podíamos pelear.

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