- ¿Qué ha pasado? - Pregunto a Tara.
Ella me observa con desaprobación y me hace una seña con su cabeza para que la siga a las oficinas del set. Camino detrás de ella, mi mente no puede eliminar la imagen de Agnes recostada observando el cielo y a los pájaros que volaban a nuestro alrededor, definitivamente la chica tenía algo que me hace difícil apartar la mirada.
Era hermosa, como jodidamente asombrosa, su rostro era como el de un querubín, y su cuerpo era digno del de una diosa, me preguntaba si la piel debajo de su ropa sería tan suave como la que alcancé a tocar durante las grabaciones.
- Casi lo arruinaste todo hoy Bozydar.
- ¿Te refieres al pequeño accidente con mi supuesta novia?
- Si, me refiero a que tuviste los cojones para cogerte a una extra en su propio camerino
Tara no necesitaba saber que nada de eso fue planeado, prefería que se quedara con esa idea a que supiera que en realidad había entrado al camerino de Agnes para intentar conocerla mejor, pensé que podría tener algún diario olvidado o su iPad escondido entre los cajones, lamentablemente no había encontrado nada de ella, más que un pequeño espejo con su nombre detrás, el cual por supuesto, ahora se encontraba en el bolsillo de mi chaqueta.
Cuando me di cuenta de que mi búsqueda no había sido exitosa y estaba caminando rumbo a la puerta, la chica entró al trailer buscándola para un autógrafo, tuve que usar mi mejor arma: el sexo.
- Simplemente sucedió. - Explico.
Al cruzar las puertas de su oficina temporal, ella cierra la puerta para que los curiosos que nos han seguido no escuchen.
- ¿Entiendes que no puedes arruinar esto?
- Lo hago
- Parece que no lo haces
- No soy un idiota. - Recuerdo las palabras de Agnes. - No lo arruinaré de nuevo ¿está bien? Seré más responsable.
- Solo te pido que finjas ser un buen chico por seis meses, si tenemos éxito, incluso puede que el contrato termine antes. - Se sienta detrás del viejo escritorio.
- No sé cuántas veces debo decirte que no lo haré. - Bufo
- Esto puede hundirte o mandarte a la cima del éxito.
- Tara, ya estoy en la cima del éxito, no necesito de nadie para estar ahí. - Me señalo a mi mismo con arrogancia. - Nadie podrá superarme.
- El ego y la arrogancia son los peores enemigos del ser humano Bozz.- Niega mientras me observa.
- ¿Aún puedo salir a fiestas? - Pregunto esperanzado.
- Si, puedes, pero no puedes enredarte con otras chicas.
- No lo haré. - Incluso hago la seña de niño explorador.
- Y mantén a Ian alejado de Agnes, no queremos que él vaya a arruinarlo.
ESTÁS LEYENDO
NO LO DIGAS
RomanceDe todas las advertencias dentro del contrato, solo una es la más importante... no lo digas. [Libro 1: Trilogía Reflectores]. Obra protegida por derechos de autor, se prohíbe su copia, adaptación o distribución sin la autorización del autor. Contien...