De todas las advertencias dentro del contrato, solo una es la más importante... no lo digas.
[Libro 1: Trilogía Reflectores]．
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Notaba a Bozydar tenso y cortante desde hace algunos días, también había estado tomando más de lo que usualmente hacía. Lo miro de reojo mientras cenamos acompañados de mi hermana. Tiene los hombros rígidos y come forzadamente. Toda esta situación se siente muy incómoda y me pregunto si ellos dos han tenido algún altercado o ¿a lo mejor yo era el problema? No estaba segura de que ambos se llevaran bien, pero ninguno había mencionado nada.
Mi situación tampoco era la mejor, el modelaje no me causaba la misma felicidad que antes, estaba preocupada por la situación de mi hermana y lo que pasaría cuando mi madre se enterara. También me inquietaba el evidente problema de drogadicción de Bozydar, había notado que consumía más cocaína que antes y cuando despertaba lo primero que hacía era ingerir esas pequeñas pastillas de colores, sospechaba que era éxtasis, pero no quería preguntarle.
Mastico mi ensalada con un nudo en el estómago. Al igual que mi estabilidad mental, mi apetito había desaparecido desde hace unos días.
- ¿Has hablado con mamá últimamente Jossie? - Pregunto para romper el tenso silencio.
- Si, hace como tres días me habló, pero aún no le digo que pasó. - Bebe un poco de su lata de refresco. - No me siento cómoda hablando del tema.
- Si quieres puedo decirle yo. - Tampoco quería hacerlo, pero tenía una responsabilidad como la hermana mayor. - Si me lo permites.
- No, se lo diré cuando esté lista. - Mira de reojo a Bozydar. - Pero gracias.
- Si quieres mañana podemos salir a algún lugar. - Ofrezco.
- Me lo pensaré, solo que me siento cansada así que iré a mi habitación. - Anuncia mi hermana. - Buenas noches.
- ¿Te sientes bien Jossie?
Bozydar suelta un resoplido a mi lado. Mi cuerpo se tensa ante su evidente desagrado pero mantengo mi vista en mi hermana menor. Ella le da una mirada de odio a Bozydar pero no le dice nada.
- Si, solo que se me ha revuelto el estómago.
Ella se va y entonces sí me vuelvo para enfrentar a Bozydar.
- ¿Cuál es tu problema?
- Ninguno. - Bebe de su cerveza con avidez hasta terminarla de un solo trago.
- ¿Entonces? ¿Por qué actúas de esa manera con mi hermana?
- No actúo de ninguna manera con ella, soy así con las personas.
- No eres así conmigo. - No puedo evitar señalar.
- Su mandíbula se tensa y rompe el contacto visual. Inhala profundamente y se mantiene callado. Lo siento levantar muros de defensa dentro de su cabeza y eso me causa frustración.
- Estoy consciente de ello.
- ¿Ya te ha enviado la información el director sobre Jossie? - Cambio el tema.
