Saltando entre las ramas y ramas, dejando atrás el pequeño incendio que poco a poco se estaba extendiendo, Luz, sin pizca de estar cansada, va directo donde se encontraba Jeremy combatiendo con Mapo segundo, y Lyna, que corría sin parar, pero sin ir tan rápido para no dejar atrás al padre que cargaba a Inés; en cambio, Alessio y Julia, que habían sido los primeros en llegar, esperaban la llegada de ellos sentados en el carruaje.
—Han pasado varios minutos... ¿Estarán bien? —Preguntaba Julia.
—Bueno... No sabría que responderte... —La observa con inseguridad—, pero no podemos hacer mucho más que esperar.
—Yo podría hacer algo, aunque mi dominio actual con tierra no ayudaría mucho... Tampoco sabemos que serán de los otros o si lograron al menos rescatar a mi padre... Lo siento si los metí en esto, debería haberme quedado ahí y morir junto con mi padre...
Observando como sus ojos se nublaban ante la incertidumbre al bajar su mirada, Alessio sabía que las posibilidades que algo pudiera salir mal eran altas, pero tampoco podría estar de acuerdo y afirmar una derrota sin saber los resultados, así que de inmediato, confiado a este pensamiento, expresa a Julia.
—Es cierto que no sabemos que serán de ellos, pero algo dentro de mí dice que tenemos que mantener la fe que todo saldrá bien, mírame, yo no tengo ni un poder o habilidad, más bien, debe ser un milagro que aún esté aquí, pero pensándolo bien... Es mi error decir que es un milagro, si estoy aquí... No, si estamos aquí es por la gran defensa que nos dio Luz y por ti, ¡¿acaso no te has dado cuenta?! Cuando usaste tu habilidad con la tierra expulsaste una cantidad de polvo considerable haciendo que unos enemigos se quedaran cegados y Luz los haya derrotado, y ni que hablar de Jeremy, estuvo muy neutral ante las palabras de este tipo, y gracias a eso, pudimos escapar gracias nuevamente a Luz, aunque no sé qué será de Lyna, Inés y de tu padre, tengo la certeza que Luz los esté ayudando.
Intentando animar a Julia que tenía sus manos tocando sus ojos, confundida con ese extraño carácter de confianza, intenta defender su incertidumbre.
—¿Por qué dices esas cosas? ¿Por qué tienes tanta confianza en ellos? ¡Los Mapolas no son un grupo fácil de derrotar! ¡¿Qué victoria tienen ante todos ellos?!
—Bueno, por lo que demostraron no eran muy fuertes o hábiles, tu misma lo viste como cayeron. Te digo estas cosas por una simple razón —mostraba su pulgar en alto—, no quiero que pierdas las esperanzas ante una derrota no dada, además, no permitiré que alguien ponga en duda en las cualidades de mis amigos, ellos podrán lograrlo. —Decía Alessio con confianza observando a Julia, para que paso seguido voltee su mirada al bosque donde se encontrarían sus compañeros, esperando una señal de ellos.
Había un silencio profundo en el ambiente donde se encontraban, el ruido de los grillos era lo único que sonaba, Alessio sabía que estaba poniendo toda su confianza en ellos, no podía hacer mucho, e ir hacia allá era su pena de muerte.
Julia, confundida ante la reacción de Alessio al ver el bosque sin decir nada, voltea su mirada hacia ese bosque profundo donde se encontraba el campamento de esa gente que lo tuvo prisionera; sabía que ser pesimista lo le serviría de nada, tampoco ir hacia allá, pero poner su confianza en personas que aún apenas había conocido y que se habían propuesto a ayudarla, era lo único que podía hacer.
Alessio seguía sin decir nada, quería mantener la calma, pero sus inquietudes ante lo que posiblemente podría haberles pasado no era algo que quería pensar, sobre todo en Lyna, que era a la que más temor tenía si le sucediera algo, por lo que aprieta poco a poco la madera del asiento donde estaba sentado, siendo observado por Julia, dudando en las palabras que le dijo Alessio.
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Bajo mi mente en otro mundo
FantastikLos dolores que más duelen, son los errores que no puedes corregir, menos aún si la misma vida no te lo permite, pero... Si pudieras corregirlos de una manera dolorosa y sufrir en cada vida que vivas para tener la felicidad que tan anhelas... ¿Podrí...