POISONED LOVE

2

YOUNSU

Me levanté esa mañana algo más cansada que el día anterior, sabía que Jeon Jungkook estaría rondando por el sitio donde había decidido seguir mis estudios, ya era mala suerte la mía el tener que volver a involucrarme de nuevo con él.

Que me dijera que quería que me fuera de la universidad me dolió mucho, ya me dejó claro que no quería nada conmigo en el pasado, yo me fui dolida de su lado y nunca volví a darle ningún motivo para que creyera que me interesaba volver a tener una relación íntima ni de amistad siquiera con él.

Me duché y me vestí con un vaquero y un jersey de color negro, hacia algo de frío hoy. Cogí mi mochila y salí todo lo deprisa que pude para no ver ni a mi madre ni al desalmado de su marido.

Llegué a la parada de autobús y esperando que viniera me puse a leer un anuncio que había escrito en un papel en una farola. Alguien buscaba compañero de apartamento, era estudiante y ponía la cantidad a pagar por el alquiler, al leer la zona donde se encontraba me di cuenta que estaba cerca de la universidad. En mi cabeza empezaron a bailar los números. ¡Me interesaba!, rápidamente cogí el móvil para marcar el número.

Sonó la tanda de pitadas...

-¿Si?

-Buenos días, llamaba para lo del apartamento que hay en la zona Norte de la ciudad, he leído su anuncio.

Se quedó callado por un momento y en ese instante me di cuenta que un chico alto me miraba, estaba justo a mi lado, miré tímidamente.

-Creo que me estás llamando a mí -dijo con una sonrisa.

Estaba con el móvil en su oído.

-¿Tú eres el del anuncio? -rei nerviosa, estábamos hablando por teléfono uno al lado del otro.

Reímos, era algo tan estúpido.

-¿Estás interesada? Me queda una habitación libre, hay un chico, una chica y yo -me
sonrió- serás bienvenida sino eres una psicópata, no eres una asesina y te gustan las palomitas viendo una peli de miedo -ladeó su cabeza y guiñó su ojo.

-Puedes dormir agusto por las noches que no te voy a asesinar -dije sonriéndole.

-Pues entonces eres bienvenida -en eso llegó el autobús.

-¿Vas a subir? -le pregunté.

-Si voy a la universidad del Norte -lo miré con mis ojos abiertos.

-Yo también voy allí -me puse contenta, iba a conocer a alguien simpático, estaba tan sola.

-¿Tú? -me preguntó mirando mis ropas un poco desfasadas de la moda actual, mientras subíamos lo pude observar haciendo eso, nos sentamos juntos en dos asientos.

Eso me puso algo triste, seguro que se había dado cuenta que era pobre.

-Gané una beca, fui de las primeras de mi promoción -dije mirando por la ventanilla hacia el exterior, siempre me había dado verguenza ver las miradas que la gente me ponían por ser de inferior clase social.

-Va a ser una pasada que estés allí estudiando -reía- yo volví mi mirada de nuevo a él- soy Kim Taehyung -me extendió su mano y yo se la estreché- desde hoy seremos compañeros de apartamento y amigos de universidad.

-¿No te importa que no sea como tú? -le dije sorprendida.

-¿Cómo yo? No te entiendo y dime tú nombre que yo ya te lo dije -sonreía tan tierno y era tan guapo que mis mejillas se volvieron algo rojas.

-Soy Younsu -dije.

-Bonito nombre y nunca me importó la clase social de nadie -dijo y me pareció perfecto en ese momento.

Hablamos en todo el trayecto y llegamos a la universidad andando los dos juntos. Al llegar a la entrada vi a Jungkook con una chica rubia y muy guapa, mis músculos se tensaron ¿Nada más llegar tenía que verlo?

-Mira que suerte, estáis aquí -dijo Taehyung parando al lado de ellos. Yo me sentí tan violenta que empecé a andar para irme de allí, ya me dejó claro que no me quería a su alrededor.

Pero Taehyung cogió mi mano y paró mi paso.

-¿Dónde vas? Te voy a presentar a tu compañera de apartamento, ella es Lisa -dijo y ella me dedicó una pequeña sonrisa mirando mis ropas con algo de asco.

-¿Puedes venir un momento? -Lisa cogió la mano de Taehyung y se lo llevó lejos para hablar con él. Yo me quedé allí sola al lado de un Jungkook serio y con cara de pocos amigos.

Sin decir nada moví mi cuerpo para irme, me sentía tan despreciada en ese momento, porque seguro la chica estaba diciéndole a su compañero de apartamento que yo no era de su agrado. Ella sería una de esas niñas de papá, las que tenían todo cuando su boca se abriera con un capricho. Mientras yo era alguien que ni padre tenía.

-¡Espera! -escuché decir a Jungkook- tengo que decirte algo.

Paré y me volví algo enfadada, era el segundo día de universidad y él no me dejaba en paz.

-¿Qué quieres ahora? -dije seca y con mi rostro despiadadamente serio, fue mucho el daño que me hizo en el pasado, no se me olvidarian nunca sus dolorosas palabras.

"Nunca creí que fueras una ladrona, si lo que querías era mi dinero te podía haber pagado cada vez que estuviste en mi cama"

Lo odié tanto, su madre fue la causante de toda nuestra desgraciada separación pero él tenía que haberme creído a mí, yo nunca robe nada de nadie, mis ropas eran las que eran porque nunca tuve dinero para comprar otras y no por eso robaba para vestir a la moda, me aguantaba como podía con mi miserable vida.

Jungkook hizo que me enamorara de él porque quiso, me buscaba y me decía día tras día que le gustaba, al final me vi envuelta en sus brazos y sus besos. Fuimos muchas veces uno solo. Pero ahora el odio nos consumía.

-¿Para eso has venido aquí? ¿Para estar siempre enredada a mi alrededor? -me decía con tono sarcástico y enfadado.

-¿Cómo dices?

-¿Cómo supiste que Tae es mi amigo? ¡No creas que vas a volver conmigo porque te involucres con mis amigos! -gritó enfadado.

Yo apreté mis puños y respiré algo agitada, era un gilipollas en toda regla.

-Mira Jungkook, no me importa nada que venga de tí -apreté mis dientes- si vieras que cada vez que te veo sólo quiero que desaparezcas....estoy tan cansada de que me trates del modo en que lo haces..

-¿Y que esperabas después de lo que hiciste? Que te conozco Yosy, sé lo que quieres de los demás -quería hacerme daño, lo veía en sus ojos despiadados y en su cuerpo tenso- ¿También vas a follar con Tae y le robarás después?

Sentí tanto dolor en mi pecho que le di una cachetada en su mejilla con todas mis fuerzas, las lágrimas salieron y mi rencor también.

-No te vuelvas a acercar a mí....y ¡¡No vuelvas a llamarme Yosy!! ya perdiste ese privilegio hace tiempo.......eres la peor persona que nunca pude conocer -me fui corriendo y allí lo dejé, lloraba y lo odiaba......