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JUNGKOOK

—Buenas noches Jungkook..

—Buenas noches Señor..

—¿Vienes a por mi hija? —estaba en la casa de Lisa, llegó la hora de la fastidiosa cena. Odiaba todo lo relacionado a las reuniones de gente adinerada, eran todos unos superficiales.

—Si señor vengo para llevarla a la cena —allí estaba yo con mi traje negro y mi pelo engominado, parecía un puto pijo igual a ellos.

—Jungkook que alegría que ya estés aquí —Lisa apareció tan espectacular cómo siempre, era una chica muy linda y cualquiera estaría loco por tenerla a su lado, pero yo estaba ya enamorado mucho antes de conocerla, Además era tan superficial que me desesperaba.

—Si estás lista nos podemos ir —dije muy correcto bajo la mirada de su padre.

—Papi luego nos vemos en la fiesta—dijo ella dándole un beso en la mejilla, su padre se derretía con las muestras de cariño de su niña, porque no creo que se diera cuenta que ya era toda una mujer, por eso ella era tan superficial porque le daban los caprichos de una niña de cinco años.

Yosy y ella eran tan distintas, una salió de su casa a toda prisa porque se sentía atemorizada por el maltrato que le daban y Lisa quería saber lo que era vivir sola en un apartamento, aunque volvía a casa cada vez que se le antojaba. Hoy lo hizo porque mi padre y su padre decidieron que teníamos que dar el paso de que nos vieran juntos, cómo los futuros esposos de dos de las más grandes empresas de Seul, habían sellado ese acuerdo con mi sangre.

—Jungkook —me miraba con una ceja levantada en forma de advertencia— es mi más preciado tesoro así que si la haces llorar perderás lo que tienes entre las piernas —miraba mi entrepierna para luego poner de nuevo sus ojos en los míos de forma dura.

—N-No se preocupe Señor.... no haré tal cosa —le hice una reverencia y salimos fuera, maldita sea como odiaba toda ésta mierda.

Ella se cogió de mi brazo e iba dando pequeños saltitos toda contenta mientras yo iba a explotar de un momento a otro.

—Nuestra boda será una de las mejores de Seul....mi vestido será el más bonito jamás visto y más caro de todos y tendremos tres hijos porque.....

—Lisa callate —dije entre dientes y enfadado.

Estuvo callada mientras conducía, se lo agradecí porque no quería que me contara todo el tiempo como seria mi futuro junto a ella, me daban escalofríos, llevaba el coche de lujo que mi padre me compró para mí último cumpleaños. No quería cogerlo nunca pero hoy fui obligado a hacerlo, el hijo de un gran empresario tenia que lucirse delante de la gente.

Llegamos y nos encontramos allí a todos, Jimin, Taehyung, Yoongi y hasta J-hope se veía por una esquina. Todos nuestros padres tenían grandes empresas. Estaban forrados en dinero pero no tenían sentimientos, eso no se podía comprar.

—Hola Jungkook —me quedé mirando a alguien que llevaba tanto tiempo sin ver que casi no lo reconocí.

—¡Dios! Namjoon cuanto tiempo ¿Y esos músculos?... estás enorme

—La última vez que nos vimos tenía catorce años ¿Qué esperabas que siguiera igual? —los dos reímos

Namjoon y yo fuimos muy amigos, cuando éramos pequeños estaba siempre en mi casa, porque mi padre y su padre trabajaban juntos en un proyecto, era mayor que yo tres años pero jugamos siempre a todo sin importar la edad.

—Hola —dijo Lisa de pronto, ella nunca esperaba porque tenía que ser el centro de atención.

—Hola soy Namjoon..

—Y yo Lisa la novia de Jungkook —él al escuchar novia me miró todo serio.

Volvió a mirarla cómo si nada, yo sabía porqué estaba de ese modo, esperaba a otra a mi lado.

—Eres muy bonita así que no sé cómo eres novia de un idiota como éste —dijo él y ella rió con esa risa que tiene que me desesperaba.

—¡Ahhhh! —gritó así sin más y me sobresaltó —¡Mira quién hay allí! Mi amiga....mira Jungkook —me daba golpes en el brazo medio histérica, yo le cogí la mano para que dejara de golpearme, puse mi mano en su espalda y la empujé un poco.

—Ve un ratito y habláis de vuestras cosas....venga —la empuje un poco más desesperado y ella se fue por fin.

Suspiré largo, saqué todo el aire que pude.

Namjoon me miraba atento.

—¿Dónde está Younsu? —preguntó y yo puse mi mano en mi pelo para pasar mis dedos por ellos cómo tanto me gustaba y ni eso pude hacer, me di cuenta que la gomina lo tenía todo tieso.

—¡Mierda! ¡Joder! ¡Me cago en...!

—Tu vida es maravillosa ¿No? —dijo mi amigo y puso una sonrisa.

—Mi vida es una auténtica mierda, mi vida se está volviendo una catástrofe —dije mientras cogimos dos copas de vino que puso una chica ante nosotros.

—Cada vez las contratan más bonitas para las cenas de gala —dijo Namjoon mirando de arriba abajo a la chica que se iba.

—Son todos unos putos pervertidos —dije y suspiré.

De pronto sentimos un estruendo, todos miramos y una de las chicas había dejado caer su bandeja al suelo, estaba encima de un montón de cristales y se quejaba.

Mi madre y unas amigas de ella igual de rancias la miraban desde arriba, mi madre decía algo de que le había llenado su abrigo. Con los que tenía colgados allí en casa, puse mis ojos en blanco.

La chica puso sus manos en su rostro y empezó a llorar, me quedé escuchando sus lloros y mi pecho se contrajo.....

¿Yosy?.............

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