Sé que es muy tarde para subir, pero no he podido subirlo antes...
CAPÍTULO 10.
Se acerca más y me da un beso en la mejilla, ¡UN BESO EN LA MEJILLA!
-Nos vemos. –Dice y se marcha ¡SE MARCHA!
No me ha besado, no lo entiendo, siempre beso a los chicos en la primera cita, o más bien ellos me besan a mí pero Eric no y no lo comprendo.
Yo quería que me besara, lo he deseado y no lo ha hecho, con cualquier otra persona habría funcionado pero con él no; tampoco es que quiera utilizar eso con él, no quiero obligarle a quererme, aunque tampoco sé si podría hacerlo, al fin y al cabo no sé qué es lo que puedo hacer, pero es que no entiendo por qué no me ha besado.
Subo en el ascensor y abro la puerta de mi casa, mi madre está en el sofá tumbada viendo la televisión y se gira hacia mí.
-¿Qué tal con las chicas?- Olvidaba que no le dije a mi madre que iba a salir con Eric, habrá supuesto que he salido con mis amigas.
-Bien, pero… no he salido con…
-Ya, ha llamado Niki y me ha dicho que habías salido con las demás y que la llamases cuando llegases. –Dice interrumpiéndome, Niki me ha salvado de una buena, no quiero mentirle a mi madre pero no estoy segura de si debo contarle lo de Eric todavía.
-Vale, voy a llamarla.
Cojo el teléfono y me voy a mi cuarto, marco el teléfono de Niki y espero.
-¿Sí?
-Niki, soy Dulce.
-¡¿QUÉ TAL TE HA IDO!?
-No grites, que me dejas sorda. Bien, todo bien quería darte las gracias por no decírselo a mi madre.
-Podrías habernos dicho que no se lo habías dicho a tu madre, he estado a punto de contarle que estabas con un chico cuando me ha preguntado si es que no estabas con nosotras.
-Lo sé, gracias de verdad ¿Habías llamado por algo?
-Sí, era porque vamos a quedar mañana todas y si te venías.
-Claro avísame cuando sepas la hora tal y ya.
-Ok, adiós.
-Chao.
Cuelgo y me tumbo en la cama, ha sido una noche increíble, a pesar de lo del no beso. Estoy deseando que llegue mañana para contarles a las chicas todo lo de la cita, y también quiero contarles lo de Mark, me preocupa que se obsesione conmigo y empiece a acosarme.
Me pongo el pijama y me voy al salón a ver la tele, mi madre ya se ha ido a su cuarto parece ser. Me tumbo y enciendo la tele, están echando una película de Harry Potter que ya he visto, me pongo a verla porque me recuerda a cuando era pequeña pero caigo dormida a los 5 minutos.
A mitad de la noche me despierto con el sonido de una especie de respiración, la televisión está apagado y llevo una manta, supongo que mi madre me la habrá puesto. Sigo oyendo la respiración, como está todo oscuro me da miedo y me giro, me parece haber visto una sombra moverse y susurro:
-Mamá.
Oigo la respiración más fuerte y sé que no es mi madre, empiezo a marearme de nuevo como en el instituto y lo veo todo de nuevo rosa y extraño, empiezo a oír de nuevo la voz de Eric llamándome, pero no consigo escuchar lo que dice, todo es demasiado confuso y cuando voy a vomitar me caigo del sofá, lo cual me despeja por completo.
Salgo corriendo a mi habitación y me encierro como si eso pudiera salvarme de lo que hay fuera, me tumbo en la cama intentando calmarme y agotada me duermo de nuevo.
Cuando me despierto a la mañana siguiente huele a tortitas y salgo de la cama rápidamente para comérmelas mientras estén calientes, porque adoro las tortitas.
Me siento en la mesa pequeña de la cocina, donde desayunamos y saludo a mi madre que me da un beso en la frente y me sirve 3 tortitas con chocolate.
-¿Qué tal has dormido cielo?
-Bien mamá ¿Cómo es eso que has hecho tortitas?
-Verás cielo es que me he despertado animada y he pensado que como te gustan mucho las tortitas…
-Ya, ¿Seguro que no hay nada que quieras endulzar para hacerlo pasar más fácil? –No sería la primera vez que hace eso.
-Que va, es más, tengo una buena noticia.
-¿Y cuál es?
-Pues… vamos a ir a pasar el día a casa de Mark con sus padres.