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Sana y Dahyun hoy harían una cena para reunir a todas las chicas y sus familias ya que, últimamente, con todas las responsabilidades, no habían tenido mucho tiempo para hacerlo.

Dahyun había pasado toda la semana organizando la casa, a pedido de Sana, mientras esta se encargaba de hacer las compras para preparar una cena que sea del agrado de todos. También buscó recetas de todo tipo, ya que Nako era vegetariana, Seungmin era intolerante a la lactosa, Heejin no comía ciertas texturas, Jihyo era alérgica al ananá... Cada problema que pudieras imaginar, alguien seguramente lo tenía.

Cuando todas llegaron con sus hijos, el lugar era un caos total. Los más pequeños se la pasaban charlando y riendo escandalosamente. Nayeon había bebido varias copas de vino, así que ella también se reía igual de fuerte que los niños.

─...Y entonces Jeongyeon dijo "¡Levántate y hazlo tú!" ─Nayeon soltó una carcajada que se les contagió a todas las demás en la mesa.─ ¿Entienden? ¡No puedo caminar!

─Hablando de caminar...─ Jeongyeon interrumpió a su esposa, algo avergonzada.─ El psicólogo dijo que caminar o hacer ejercicio podría ayudar con el TDAH de Ryujin.

─A Heejin no le sirvió, nunca fue muy deportista. ─Comentó Chaeyoung, mientras tomaba algo de vino de su copa.─ Pero quizás el autismo y el TDAH funcionan diferente, dile que pruebe.

─No sé si querrá, ha estado algo problemática últimamente. ─Dijo Jeongyeon mientras comía lo que había en su plato.

─Oye, no es problemática. ─La corrigió Jihyo, suavemente.─ Nayeon y tú decían lo mismo de Heejin ¿Recuerdan? Pero ellas sólo necesitan un poco más de apoyo, es todo.

─¡Claro! Funcionan diferente que los niños neurólogos. ─Agregó Sana con una sonrisa. Todas se rieron y ella las miró con extrañeza.

─Neurotípicos, Sana. ─La corrigió Mina, entre risas.

─¿No era "Neuróticos"? ─Preguntó Momo, confundida, y Tzuyu soltó una carcajada.

─La única neurótica eres tú, amor. ─Agregó la Taiwanesa, apoyando una mano en el hombro de su esposa, quien le dió un pisotón en el pie.─ Auch. Me lo merecía.

La mesa de las adultas era tranquila, comparada con la de los niños. Jeno y Eric estaban haciendo una guerra de guisantes, usando las cucharas como catapultas y, en una de esas, accidentalmente le tiraron una a Hyejoo.

La más pequeña los miró con furia y, a cada uno les tiró una cucharada de puré de papas.

Mientras, Nako y Heejin, las más grandes entre los niños, se miraban la una a la otra.

─Estos niños actúan como si fuesen salvajes. ─Bromeó la mayor, obteniendo una mirada de confusión por parte de Heejin.

─Si fueran salvajes, no podrían hablar. Los niños salvajes suelen carecer de habilidades soc-...

─Claro, pero era una forma de hablar.─ Rió Nako, ante la confusión de su prima.

Heejin siguió comiendo lo que tenía en su plato, que constaba de comidas suaves, nada crocante que pudiera hacer mucho ruido al masticar. A pesar de sentirse a gusto con su comida, en el ambiente había algo raro. Faltaba alguien.

Contó varias veces a las personas que habían allí y se dió cuenta de que quien faltaba era Hoshi.

─Nako ¿Por qué Hoshi no está? ─Preguntó tocando el brazo de la japonesa con la punta de su dedo para llamar su atención. Ésta se encogió de hombros sin darle mucha importancia.

─Tía Sana dijo que él saldría con sus amigos porque no quería estar aquí. Ya sabes, cosas de varones, supongo. ─A Heejin no le pareció suficiente esta respuesta, ya que le gustaba saber cada detalle al respecto para terminar de entender las cosas, así que se levantó de la mesa y caminó hasta sus tías Sana y Dahyun.

─Oh, Heejin ¿Quieres más macarrones con queso? ─Preguntó amablemente Sana al verla. Heejin negó con la cabeza.

─No, gracias. Estaban asquerosos porque usaste queso cheddar y estaban muy salados. ─Respondió sinceramente, sin la intención de ofender. Sana ya sabía lo directa y sin filtro que Heejin podía ser, así que simplemente se rió. En cambio, Mina frunció el ceño y la regañó.

─Heejin, eso fue grosero, discúlpate.─ Mientras la japonesa regañaba a su hija, Chaeyoung reía a carcajadas. Sana le sonrió, tratando de hacerle entender que no pasaba nada.

─Oh, Minari, no hay problema, no me ofend-...

─Tía Sana dice que no hay problema, mamá... Pero venía a preguntar algo.

─¿Qué cosa, cielo? ─Sana la miró atenta y la jovencita asintió mirando a un punto fijo en la pared.

─Hoshi no está porque fue con sus amigos, eso dijo Nako...─ Sana asintió, dándole la razón.─ ¿Quiénes son sus amigos?

─Creo que hoy salió con Vernon ¿O no, Dubu? ─Preguntó mirando a su esposa, quién asintió.

─También con ese chico Jungkook. ─Agregó Dahyun, con una mueca.─ Ya sabes, el que es medio serio.

─¿Jungkook? ─Chaeyong las miró con sorpresa. Su esposa y su hija también estaban tan sorprendidas como ella.─ Ese es un malandro. Es el hijo del novio de mi mamá y la otra vez lo agarré fumando hierba en mi casita del árbol.

─¡¿En la casita?! ─Jeongyeon la miró con indignación. No podía ser. Sabía lo importante que era ese lugar para su prima.─ ¡Qué hijo de-...!

─¡Exacto! ─Interrumpió Chaeyoung, golpeando el puño en la mesa.─ Lo bajé casi a los golpes de ese lugar. Estaba con otros chicos allí. Uno que tenía cara de niño mimado, otro con cara de gringo y una chica.

─¿Cara de gringo? Sana, ese ha de ser Vernon. ─Dijo Dahyun preocupada, llevándose las manos a la boca con sorpresa.

─Gracias tía. ─Heejin ya obtuvo la información que quería y se estaba por ir, pero se detuvo, la miró y agregó: ─El color naranja te queda bien. ─Dicho esto, se fue nuevamente a su lugar, dejando a sus tías preocupadas y charlando al respecto.

ᴍᴀʀʀɪᴇᴅ ʟɪꜰᴇ | ᴍɪᴄʜᴀᴇɴɢ PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora