Las primeras tres clases, no dejó de ver la puerta, esperando a que el director Fox entrara por ella y se la llevara. La expondría en frente de los padres de Gina y la obligarían a pedir una disculpa. Sin embargo, eso no sucedió y se sintió protegida cuando comenzó a comer su gelatina de limón. Miró a Matt en las últimas clases, pero no se miraron de más.
Lena rompió su rutina de regreso cuando salió del colegio, tomando el camino contrario. Iría a la biblioteca a perder tiempo, leyendo cualquier cosa. Así lo hizo y regresó a su casa en la noche, no le importó hacer tarea y se tiró en la cama, solo quería dormir.
Despertó temprano, se dio una ducha y tomó su cabello en una coleta, era el cumpleaños de Matt y quería verse diferente. Tomó su mochila y salió de casa. Dejó cosas en su casillero y tomó un cuaderno, tirando algunas cosas en el trayecto. Ella las levantó y se sorprendió al ver la caja de curitas, ni siquiera recordaba porque las tenía ahí, las guardó en su mochila y se fue a su salón. Matt ya estaba ahí, pero él no la miró, estaba demasiado concentrado en su cuaderno.
Lena no lo miró de más hasta que las clases terminaron. En la cafetería tampoco lo vio y solo estuvo presente en las últimas dos clases. Lena corrió hasta el bañó y se encerró en uno de los cubículos, se moría por hacer pipí. Se sintió liberada y jaló la palanca del inodoro, pero no salió del cubículo cuando escuchó a un par de chicas entrar. Una de ellas abrió una llave y la otra pendió un cigarrillo.
—¿Tienes otro? —Pregunta una.
—Sí.
Lena escucha como el empaque de los cigarrillos era aplastado y después el encendedor tratando de encender.
—¿Escuchaste lo que pasó ayer?
—Oh, sí, todo el colegio lo sabe. Lena Holden roció a Gina Jefferson con gas pimienta.
—Sí, Fox la expulsó.
—¿En serio? ¿Desde cuándo Fox le da la razón a los menos afortunados?
—Desde que hay un video en Facebook que prueba que Gina tuvo la culpa. Pero ¿sabes qué es lo mejor de todo este asunto?
—¿Qué?
—Ayer los padres de Gina vinieron a hablar con Fox, exigían que Lena Holden fuera expulsada por lanzarle gas pimienta a su hija y que pidiera una disculpa pública.
—¿Y?
—Fox se negó y se mantuvo en su decisión, ahora se dice que Gina no volverá nunca más. Al parecer sus padres la cambiaran de colegio.
—Me alegro. Alguien tenía que darle su merecido a Gina, tenía años molestando a esa pobre chica, era obvio que en cualquier momento explotaría.
—Y que bien que solo fue rociada con gas pimienta, Michael y Jackson no contaron con la misma suerte.
—¿Y eso qué tiene que ver?
—Es evidente que alguien a quien molestaban les hizo eso. Ambos eran unos malditos enfermos.
—¿Y qué si a Gina le sucede lo mismo?
—Meh, es una idiota también, creo que se lo merece.
Lena sonrió un poco, al menos no era la única que pensaba que todos ellos se lo tienen merecido.
La ojiazul tomó su mochila y salió del cubículo. Las chicas se miraron de inmediato, siendo conscientes de que ella había escuchado todo lo que dijeron. Lena se acercó a los lavados y lavó sus manos.
Miró a las chicas y les sonrió.
—¿Cómo están? ¿Bien?
—Aaa, sí, ¿y tú? —Le contestó una.
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Mental Decadencia
Teen FictionLena solía odiar todo aquello que tenía en la vida; su casa, la escuela, el pueblo, pero sobre todo a ella misma. Boulder Colorado no le brindaba la seguridad que ella necesitaba, sólo había una razón por la cual ella seguía andando y esa razón llev...