Takahashi Misaki.

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Fuyuhiko venía sintiéndose mal desde hace uno o dos meses, debido a su adicción al trabajo ignoró todas las señales de alarma, su corazón dio muchos avisos, siendo ignorado él simplemente "explotó", en consecuencia Fuyuhiko muere a 42 mil pies del suelo, en un avión privado, sufrió un ataque fulminante y la tripulación no pudo hacer mucho.

Los abogados de la familia Usami se encargaron de inmediato, y según la voluntad de Fuyuhiko, todos sus bienes serían repartidos a sus hijos, Usami Haruhiko y Usami Akihiko.

Porsupuesto pese a ser una repartición, ésta no se da en partes iguales, el interés de Fuyuhiko siempre estuvo cerrado en los negocios, la responsabilidad económica de los Usami en su propio país era inmensa, fue presionado a asegurar tales bienes, es por eso que la mejor y única opción para tal responsabilidad, solo podía ser su hijo Haruhiko.

En cuanto a Akihiko, sabe a ciencia cierta que él jamás a estado preocupado de los negocios familiares, menos en el último tiempo dónde perdió la cabeza por la muerte de Misaki.

Respecto a eso.. Fuyuhiko nunca tuvo nada en contra de Misaki, pero jamás pudo aceptar la relación que llevaba con Akihiko, nunca perdió la esperanza y cuando Sudou llegó a sus vidas vio una pequeña salida al problema que significaba Misaki.

Fuyuhiko nunca a sido un hombre holgazan, tampoco tiene una pizca de estúpido, es por eso que indagó en la vida del supuesto nuevo interés de su hijo. Fue difícil, pero no imposible, pagó por una primera investigación y no tuvo suerte, "no tener suerte" le hizo especular del origen de Sudou, fue más allá y contrató servicios más especializados, el tiempo pasó y su curiosidad pasó de ser picante a decadente, estaba perdiendo la esperanza cuando en medio de una reunión de negocios, su contacto se comunicó con él, se enteró de muchas cosas, se impresionó cuando vio la conexión entre Sudou y el magnáte más incógnito de los grandes negocios, tan grandes como los Usami. El señor I, o mejor dicho, el único sobreviviente de la familia Mink, aunque eso no era completamente cierto, ya que Sudou también pertenecía a esa familia, curiosamente no estaba en sus registros, Iason fue muy meticuloso en borrarlo de su genealogía, seguramente para alejarlo del peligro.

Fuyuhiko no pudo seguir más allá, fue descubierto y amenazado por el mismo "Señor I", él siendo un viejo zorro sabía muy bien cuando debía retirarse de una batalla, tuvo que hacerlo, aunque nadie a dicho que el retiro debe ser definitivo, a veces hay que dejar ganar al enemigo, y en un momento de debilidad, se le ataca por la espalda, una técnica muy cobarde, pero válido si se trata de la vida de uno de tus hijos.

Fuyuhiko continuó discretamente, fue por cobre y encontró oro. Porque vio algo, se enteró de algo impresionante en su camino hacía convertirse en un chismoso.

Él tenía una nieta, una rama de los Usami, no solo eso..

Dejando atrás sus prejuicios Fuyuhiko tomó el primer avión a Tokio. Su objetivo por supuesto era ver a su hijo, Akihiko. No sabía si su cabeza estaba deteriorada al punto de que no reaccionaría con nada, pero él tenía una verdad que contar, una que podría sacar a su hijo de la enfermedad sin cura llamada Misaki.

Porque quizá el remedio era la misma enfermedad.

Lamentablemente Fuyuhiko se quedó a medio camino, sus intenciones se hicieron polvo al igual que su vida.

Antes de morir alcanzó a decir algunas cosas de las que ni siquiera tuvo certeza antes de cerrar los ojos, murió en desesperación y hubiese pagado toda su fortuna por tener un minuto más de vida.

La asistente de vuelo que le dio masaje cardiaco fue quién escuchó sus últimas palabras, ella puso mucha atención, y pese a que entendió perfectamente, no está segura de hablar y quizá decir algo incorrecto, no quiere causar un revuelo con lo que quizá son devarios de un moribundo.

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