~TERMINADA~
Libro #2 (Saga Nosotros)
TERCERA TEMPORADA DISPONIBLE
EN MI PERFIL
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- Mamá... - susurró enmedio del llanto - ¿Un hombre se puede enamorar de dos per...
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- Increíble, la tensión que se siente aquí da miedo - fue lo primero que dijo Alessia al entrar a la sala con un tono burlón - ¿Qué sucede aquí, mamá?
Mi madre se acercó a ella y la abrazó.
- Que mal que tuviste que presenciar esto, mini conejita - suspiró mi madre resignada.
- ¡Tío Ben! - emocionada corrió hacía él, quien la recibió de brazos abiertos y la alzó en el aire - ¿Dónde está tío Ángel?
- Aún esta trabajando, cariño - ella hizo un pequeño puchero, cuando mi tío la bajó - Pero me dijo que te diera muchos besos.
Al instante en que dijo eso volvió a besar a Alessia y la comenzó a besar por toda la cara, ocasionando así carcajadas por parte de ella.
Yo miraba la escena con tanta felicidad. Hace semanas que no veía a Alessia tan feliz.
Desde siempre a existido una conexión inquebrantable entre mis tíos, Camila y mi hermana.
- ¡Quietos! - el grito de mi madre llamó mi atención.
Mis padres se encontraban respirando rápido y con la mirada fija en tío Ben.
- Pero bueno, cuéntame... - acarició la mejilla de Alessia - ¿Cómo está la princesita de mi corazón?
Mi madre carraspeó llamando la atención de todos.
- ¿Disculpa? - habló ofendida con las manos en su cintura - ¿Cómo qué la princesita de tu corazón?
Mi tío besó la frente de mi hermana y miró a mi madre.
- No te pongas celosa, mi reina - él le guiño un ojo a mi madre y le sonrió - Tú subiste de rango en cuando te casaste con ese par de bichos. Y tu hija pasó a ser mi princesita.
Mis padres gruñían como perros en celo, tanto por mi madre como por Alessia que no se despegaba de los brazos de tío Ben. Ni siquiera fue a abrazar a mis padres.
- Bueno ya, ¿Me dirán porqué mis padres tenían cara de cachorros asustados cuando entré aquí? - preguntó Alessia con burla en su voz.
Esa pregunta soltó por completo la risa de todos incluida la mía. Mis padres sólo nos miraban serios y con los brazos cruzados.
- ¡Mini conejita! - gritó mi padre Leo, enojado - Más respeto que somos tus padres.
- Perdón...papá - decía Alessia sin dejar de reír.
- Princesa, tus padres tienen esa cara desde que nacieron - habló tío Ben, muriéndose de la risa - No puedo creer como no lo has notado.
Alessia se junto con mi tío Ben y los dos comenzaron a soltar carcajadas.
- ¡Alessia Anderson Hamilton! - gritó mi padre Nick, cortando por completo la risa de mi hermana.