𝐹𝐼𝑉𝐸 : V

1.8K 155 19
                                    


JI-HYE

Lo sabía, desde el instante en el que le miré por primera vez, sabía que era un completo hijo de puta pero ¿por qué tanto? No paraba de cuestionarme si su actitud de hace algunos días había sido todo un plan suyo para hacerme mierda enfrente de su...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Lo sabía, desde el instante en el que le miré por primera vez, sabía que era un completo hijo de puta pero ¿por qué tanto? No paraba de cuestionarme si su actitud de hace algunos días había sido todo un plan suyo para hacerme mierda enfrente de sus padres o si de verdad fue mera casualidad lo sucedido.

Él es el tipo de cabrón que se llena la boca de enfrentar a cualquiera que se llene con el valor de tan solo dirigirse hacia ti de una forma ruda y altisonante, y cuando pasa tal cosa, parece más que un cobarde. 

Aunque esa clase de venganza que planeó contra mí me hizo reír unas cuantas veces. Fue muy patético.

Las clases ya habían iniciado, ayer  recibí un correo por la presidenta, Nam-Ra, a todos nos envió el horario escolar. La primera clase del día iba a ser inglés, desgraciadamente para mí. Los idiomas me gustaban, pero la clase que daba la señorita Park era bastante llena de rodeos y fastidiosa.

Para mi buena suerte, hoy en la mañana la profesora no pudo asistir al instituto, así que nos quedamos haciendo nada o tareas que no hicieron en vacaciones. Ni siquiera orientación educativa vino a suplantar la aburrida clase de inglés. Recargue mi cabeza encima de mis brazos que estaban reposados en mi mesa, estaba cansada. Anoche no dormí de la forma que me hubiera gustado.

—¿Estás bien? —preguntó Su-Hyeok mientras se sentaba a un lado mío.

Suspiré y le miré.
—Estoy cansada, no dormí muy bien que digamos.

—Qué mal. Tú nunca duermes bien. —rió.

——Desearía no pensar tanto en ese idiota... también por eso no dormí.

—Terminaste con él. Ah, sabía que no durarían mucho. —pareciera que le hizo mucha gracia.

—Cállate.

—Pero, Ji-hye, ¿no se querían mucho? Su verdadero amor me lastimaba los ojos cada que los veía juntos, era como mirar al sol. —no hace falta describir cómo se burlaba de mí.

—Eres un tonto, Su-hyeok.

Lee tomó mi mano y la entrelazo con la suya. Qué atrevido.

—Ánimo. —sonrió amablemente.

Le devolví la sonrisa.
—Nunca nos habíamos tomado de la mano. Dicen que la primera vez que te tomas de la mano con alguien es como... salir.

—¿Qué?
Me soltó de inmediato.
—Ni en tus mejores sueños saldría contigo. —agregó claramente nervioso.

Ah, si. Vaya que sabía que le gustaba muchísimo. Pero era todavía un niño como para aceptar que se moría por mí.

—Creo que deberíamos intentar ser algo tú y yo porque... Estoy sintiendo muchas cosas por ti.

Le dije y él tenía su mirada posada en mis ojos, parecía entusiasmado.

—¿Cómo, cómo? —abrió los ojos. 

—Sí. —esperaba que se lo tomara en serio. Cuando lo dije me sonó como broma, pero de pensar en un segundo en él y yo, ya vivíamos en una casa con miles de hijos.

—¡Ah sí! ¡qué tonto fui! ¿Estás recordando cómo se confesó Gwi-Nam, verdad? Pudo haber sido mejor.

—¡Ay, ya deja de sacarlo en el tema!

Pasaron las horas, Su-hyeok cambió de lugar con Sun-Hee quien por cierto actuaba de forma extraña. Puedo jurar que estaba embarazada o algo así, no dejaba de tocar su panza y no era de las chicas que usaban sudaderas anchas, en su lugar, adoraba usar sudaderas de su talla.

Dejando esa actitud tan inusual, la clase de ciencias llegó. La última del día. Su-hyeok estaba apretando las manos, cuando el señor Lee lo llamó a la mesa suya para decirle en secreto su calificación final del trimestre pasado, él apretó las manos aún más fuerte. Se moría de nervios.

Al regresar al asiento al lado mío, apretó mi brazo.
—Gracias. —dijo entre dientes aún haciéndome notar su emoción.

—De nada. —sonreí.

Cuando salimos del instituto, nos dirigimos a nuestras casas. Su-hyeok y yo solíamos hacer llamadas desde el teléfono de nuestras casas, era ridículo viviendo en el mismo edificio. Pero era muy divertido, amaba todos esos momentos con él.

—Nos vemos mañana. —dijo.

—Qué desgracia tener que verte la cara por otros cuatro días seguidos.

Rió.
—Bueno, hagamos de estos desgraciados cuatro días algo divertido.

Al momento que colgué la llamada con Su-hyeok, Gwi-Nam por primera vez en dos semanas se dignó en llamarme. Obviamente le hice esperar unos cuantos minutos, cuando el móvil llegó a notificarme dieciocho llamadas perdidas, contesté.

—Ah, hasta que contestas. Fui amable al esperarte.

—¿Qué quieres? Bastante tengo con mirarte en el instituto.

—No me volviste a llamar desde ese día.

—¿Y por qué debía hacerlo?

—Porque eres mi novia.

—Ay, no me digas. —dije— No salgo con cobardes.

—¿Cómo? —inquirió molesto.

—Ya habíamos terminado desde antes.

—Eso ya lo sé, si no soy estúpido.

—¿Entonces?

—Quería proponerte volver con este cobarde.

Reí.
—Ni en tus sueños volvería a salir contigo. Ni en broma.

—¿Qué?

Colgué.

Minutos más tarde llamó de nuevo y acepté contestar. Lo único que dijo fue: Aún te amo cuando me mandas al carajo, Ji-hye.

Última actualización 15

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Última actualización
15.08.23

𝑪𝑨𝑵'𝑻 𝑳𝑬𝑨𝑽𝑬 𝑼 - GWINAM & SU-HYEOK   ༄ 「 TERMINADA 」 AUOADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora