Amber's head

30. Amber, quédate tranquila.

Cuando Nara tenía doce años, descubrió que el mundo se dividía en dos bandos: los protegidos y los protectores.
Ella eligió el suyo desde muy pequeña, sabía que ella era una protectora, por lo que nunca dejó que nadie la intimidara, pues los protectores eran valientes, o al menos eso le enseñaron las historias que su padre le leía antes de dormir.

Ella nunca conoció una figura materna, su madre no pudo acompañarla, al menos no en esta vida y ella lo acepto desde muy temprano, recordándose que no fue culpa de su mamá, fue solo el odioso destino.

Conoció a Keila en el jardín de niños y le agradó al instante, cuando vio que un niño le estaba tirando el pelo y ella le devolvió el tirón con el triple de fuerza... ella también era una protectora, pero de ella hablaremos en otro capítulo.

Luego conoció a Amber y su primer instinto fue protegerla, porque enseguida supo que Amber era del otro bando, ella era de los protegidos.
De su amistad hablaremos después, porque hay algo que hablar aquí y es que con su nueva amiga, vino Colton, su primer "crush".

De Colton también hablaremos luego, acá vamos a hablar de que hizo sentir a Nara sus primera mariposas en el estómago, la hizo ser increíblemente segura de su personalidad y a la vez tímida al decirle que le gustaba.
Sus sentimientos fueron correspondidos, pero lo que más le impactó de él, fue que la hizo sentir por primera vez como se sentía estar del lado de los protegidos.

Le quedó claro muy rápido: Colton, protector y en ese entonces, el suyo.
Nara creció de a poco, muy despacio, experimentando todo lo que se supone que uno experimenta... incluso los corazones rotos.
Eso le dolió, jamás lo va a negar, la partida de Colton la hizo llorar como nunca antes, pero también la hizo crecer.

Nara se hizo más fuerte, más segura, más madura y descubrió que no le gustaban solo los chicos, lado que también comenzó a explorar sin miedo. Era valiente, increíblemente orgullosa de sí misma, pero como todos, tenía una debilidad, esa era su papá y perderlo, la derribó.

Ella no podía ser la protectora, no ahora y tenía miedo de que nadie la entienda, todos la veían siempre tan fuerte, ¿como podía no cumplir sus expectativas?
Pero entonces, aquella noche en el caserón, Leo apareció, se dieron besos, escalaron un poco más y de repente ella estaba teniendo un orgasmo mientras se sujetaba con fuerza de las sabanas.
Se sintió culpable, no lo niega, lloro y pidió perdón, Leo la escucho y la consoló, le dijo que todo estaba bien, que entendía y la abrazo hasta que se durmió, entonces encontró otro de su bando, otro protector... ¿su protector?

Narra Amber: ¿Cuando es que uno se da cuenta de que alguien es su alma gemela?

No tengo idea.

Honestamente, durante mucho tiempo creí que mi alma gemela estaba dividida en dos y habitaba en el cuerpo de mis mejores amigas, pero ahora, parece haberse dividido en tres...
¿Podría Alex ser mi alma gemela?
Me suena extremadamente familiar y a la vez increíblemente incorrecto, pues lo único igual que tenemos con Alex, son nuestros traumas... hasta que me pongo a considerar las cosas que yo creo son importantes de mi: me gusta la música, me gusta leer y también escribir, me gusta estar sola, más no sentirme sola, me gusta más pasar desapercibida, ser invisible me gusta porque así no sentiré el peso de cumplir las expectativas que los demás tengan de mi y es entonces cuando vuelvo a tener otro punto de conexión con Alex.
Él ha pasado mucho cumpliendo expectativas, a veces con intención y a veces sin intención, pero se que eso lo ha drenado y moldeado demasiado y no es muy lejano a mi sentimiento.