Yelena

EXTRA: CAOS.

Narrador omnisciente.

Si el mundo supiera que existen tres almas tan perversas y oscuras como lo son las de los Vasiliev, Mohamed y Ackerman: en definitiva, muchos no saldrían de sus casas, construirían refugios con tal de protegerse de semejante peligro como lo son los tres demonios malditos. Habría mucha gente rezando, pidiéndole a Dios que los castigue. Gobiernos implementando la ley marcial como única forma de defensa.

Hace seis años, con tal de mantener el mundo a salvo y obviamente proteger su imperio, los tres seres más malvados y despiadados llegaron a un acuerdo el cual estipulaba claramente que la guerra por el poder acabaría. Un acuerdo en donde los tres humanos más temidos acordaban vivir como si el otro no existiera. Cada quién continuaba con su vida, cada quién hacía lo que se pegue la gana siempre y cuando no interfiera con los asuntos del otro.

Era un asunto de: "yo no te ataco, tú no me atacas. Yo no me meto en tus asuntos, yo no me meto en los tuyos. La guerra acaba, y entre seres repugnantes que somos, mantendremos el respeto como los lideres y reyes que somos"

Los primeros años, todos creían que el acuerdo había funcionado y que por fin no se derramaría más sangre, pero, la avaricia y la codicia a veces es mucho más grande... o tal vez, no sea una cuestión de codicia o sed de poder, si no una cuestión de venganza y orgullo, un odio creciente que no ha podido mermar con el paso de los años.

Dorian Vasiliev. Hakim Mohamed. Maximiliano Ackerman: los tres se respetan. Los tres se odian. Los tres tienen metas que cumplir y, lamentablemente, esas metas van a arrasar con todo y todos los que se crucen en sus caminos.

La benevolencia no está en su vocabulario. No conocen lo que es la piedad.

Si estos tres seres son tan despiadados, malvados, perversos, peligrosos.... ¿Qué será de los seres que nazcan con su sangre? ¿el mundo estará preparado para algo mucho mas peligroso como los tres demonios?

Lo cierto es que no. El mundo no está listo para algo así, pero... ya sucedió, y muchos intentaron frenarlo.

Hace diez y siete años, exactamente el diez de abril del año dos mil. A las tres de la madrugada llegó a la tierra una criatura destinada a sembrar el caos en el mundo. Una pequeño ser destinado a superar a su propio padre, Hakim Mohamed.

Hakim, para proteger a su heredero, encerró a su esposa en una torra en una isla desierta, claro está que a ella nunca le faltó nada y vivía con las mejores comodidades, pero, no todo fue tranquilo.

Días antes de que la segunda esposa de Hakim diera a luz, la ubicación de la mujer fue filtrada. Hubieron muchas muertes en esa isla, un caos total.

Nadie quería que ese bebé naciera. Temían a que alguien mucho más peligrosos que Hakim naciera. Querían impedir ese nacimiento a toda costa, pero, a pesar de la batalla, de los golpes, de la sangre derramada, el niño logró nacer sano y a salvo.

Karim Mohamed, quien pronto se convertirá en el rey de la mafia árabe. No ha alcanzado el trono aún y ya se igualó con su padre. Su familia, si gente, el mundo: todos saben que este chico de diez y siete años será el ser más peligroso jamás visto en el trono Mohamed. Karim, o como el bajo mundo le llama: el príncipe de las tinieblas.

Por otra parte, recordando el caos que se desató con la noticia del heredero al trono Mohamed, Maximiliano ha mantenido en secreto por muchos años la existencia de su única hija y heredera.

Hace diez y ocho años, Maximiliano fue secuestrado cuando tenía tan solo diez y seis años. Su familia no descansó hasta encontrarlo y regresarlo a casa, en donde, a penas volver, Maximiliano trabajó día y noche hasta convertirse en la bestia que es ahora.