De un corazón roto

Acto 22

Acto 22

Finalmente Wescott podía ver ante sus ojos a los espíritus invertidos con los que siempre soñó. No había palabras para describir su asombro de saber que un sujeto como Itsuka Shidou era capaz de esto. Debió ser muy difícil para él ver de forma diferente al mundo que lo acogió, pero mucho más difícil vivir la vida que le tocó.

Pobre Itsuka Shidou, abandonado de lado por las chicas a las que torturó en incontables mundos y que estaban dando sus vidas por él.

—Que comience nuestra cita...
Un fuerte estruendo llamó la atención del corrompido Itsuka que miró al cielo para ver una horda de magos aproximándose hacia ellos.

—Debe ser difícil entender que no son nada ante los poderes del espíritu de origen. Patético.

Tohka, quien había sufrido el peor de los castigos, se alzó en el aire con una mirada fría. El primer mago en llegar apenas y pudo golpear una parte de la espada antes de ser decapitado por la mano de la joven cuya vida había sido cambiada una vez más.

Ella jamás buscó abandonar a Shidou. Ella lo amaba de verdad, pero desconocía que ese sujeto era también Itsuka Shidou. Confío en él, fue la primera en darle una oportunidad. No tardó mucho tiempo antes de que él la corrompiera para que se olvidara de todo. La realidad fue mutilada y transformada en algo que no era.
Los ojos de Yatogami Tohka reflejaban un profundo dolor del cuál no era consciente en ese momento. Estaba muerta en vida. 

—Parece ser que los magos no pueden con ella, pero al menos las NIBECOL lograron rodearla—masculló el albino con un sonrisa que de cierta manera reflejaba su transtornada mente.
Los espíritus denominados [NIBECOL] nacidos del Rey del Inframundo [BEELZEBUB] habían sido dotados de gran poder gracias a la anomalía dimensional que causó la llegada de Itsuka Shidou. Antes no eran capaces de luchar contra un espíritu inverso, pero ahora no solo lograban eso, sino que podían romper esa limitante que les impedía avanzar.

Tohka estaba luchando con todo su poder, aniquilando a las más débiles. Pero tal parecía que no se volverían papel como antes. De aquellas hojas renacían los espíritus con un poder y habilidades mucho mayor. Estaban perfeccionando su mente conforme <NAMEHAH> las aniquilaba.

—Impresionante, lograste cambiar la naturaleza de las [NIBECOL].
Para el corrompido Itsuka Shidou esto era una maravilla en medio de un paisaje consumido por el caos.

—¡Las voy a matar! —exclamó Tohka mientras liberaba un torbellino de energía que consumía varias casas hasta dejarlas completamente destruídas.
Las cartas se estaban tornando a favor de Wescott.

•

—Múltiples naves detectadas, estarán aquí en noventa segundos.

—Todos los miembros a los puestos de combate—ordenó Mana quien se había recuperado del asombro de saber que el sujeto que arruinó la vida de su hermano mayor era su propio hermano—. Que todo el personal no combatiente se mueva a las zonas de presión.

—Pero ellos pueden...

—No voy a arriesgarlos, Karen.

Karen, quien había sido avisada por María sobre lo que sucedió tampoco llegó a creerlo. Su mente estaba procesando todo al punto que no era capaz de mantener la calma dejando que sus emociones nublaran su juicio.

—Recibido, daré la orden.

—Gracias.

En ese momento las puertas del puente se abrieron revelando así la presencia de Artemisa y Ellen en sus nuevos [REALIZER] los cuales fueron actualizados por Murasame Reine mientras estaban en el departamento que Karen rentó para Shidou.