—Narra Lisa—
— Esa clase ha sido un coñazo, Lisa. Estoy destrozada. — Rose se sentó detrás de su mesa y se bebió media botella de agua antes de secarse el sudor de la frente. —Ahora necesito una ducha y ni siquiera me he traído una toalla. Eso solía ser fácil, ¿qué me ha pasado?
— Lo que te ha pasado es que no has dado ni una sola clase en tres semanas. Eso es lo que ha pasado. —Lisa la miró con un fingido reproche. —Volverás a ello en nada de tiempo. Claro que estás cansada, has estado perezosa, cariño —la reprendió con un tono descarado. — No me sorprende que estés cansada en vez de llena de energía.
— Sí, bueno, he estado ocupada con el trabajo y los preparativos de la boda. Me está estresando. —Rose puso los ojos en blanco. —La boda, por supuesto, no el trabajo.
— Relájate. Todavía quedan diez semanas y el recinto está reservado, ¿no? —Lisa tomó un sorbo de su zumo verde. — ¿Todavía no has tenido suerte en encontrar un planificador para la boda?
— No. —Dio un suspiro. —Todos los organizadores de bodas Indio-Americanas están completamente reservados y no me atrevería a buscar otro cualquiera. Abandonarían en la primera semana cuando conocieran a mi suegra. Nada es lo suficientemente bueno para ella nunca.
Lisa se rió.
— Pues deja que se ocupe ella si es tan experta.
— Sí, claro. ¿Y tener a mil quinientas personas a las que no conozco presenciando nuestros votos? Ya quinientas es una locura. Le pedí a Jisoo que le dijera a su madre que retrocediera un poco y créeme, lo ha intentado. Pero como su familia es la que paga la boda, no podemos excluirlos. Y mi madre y mi padre tampoco es que estén ayudando exactamente. Les gustan sus padres y me pidieron que fuera más respetuosa con su madre, ¿te lo puedes creer? No he sido más que amable con esa mujer. Hago todo por esa mujer tal como está y, aún así, Cara Amargada es todavía una desagradecida.
— ¿Cara Amargada? ¿Así es como llamas a la madre de Jisoo a sus espaldas?
— Por supuesto que la llamo así, tiene mucho sentido. ¿Quién más tiene cara de trueno y ha sido un coñazo desde el momento que la conocí?
— Fantástico nombre —dijo después de pensarlo. —Le pega.
Deslizó su silla hasta la mesa de Rose y le puso un brazo sobre el hombro. Lo sentía por ella, pero tampoco era como si Rose no hubiera sabido exactamente dónde se metía. Llevaba años quejándose de la madre de Jisoo, e incluso Lisa, que solo la había visto dos veces, había sido testigo de primera mano de lo mandona y autoritaria que era. Con demasiado tiempo en sus manos, una sola hija, una mujer que nunca estaba en casa y suficiente dinero para alimentar un país pequeño, Cara Amargada no era una persona a la que tener cerca.
— Sé que se considera malo escaparse con un amante, pero ¿no quieres simplemente irte a Las Vegas y acabar con todo? —bromeó. —Y entonces ella ya no te hablará nunca más, no te sentirás como que le debes algo y tus problemas estarán resueltos.
— No podría hacerle eso a Jisoo, ella quiere de verdad una boda con nuestra familia y amigos. —Rose lo dijo con toda seriedad, como si en realidad hubiera contemplado la idea. —Ojalá no tuviera que preocuparme de este tipo de cosas. —Se hundió más en su silla y apoyó la cabeza en el hombro de Lisa. —Pero le amo y viene con el paquete que decidí aceptar.
— Un paquete muy rico, poderoso y testaruda.
— Sí, bueno, es lo que es. Ahora me voy a callar y a ponerme a trabajar. Voy a mirar algunos lugares potenciales para un estudio nuevo de yoga en el centro esta tarde. Una vez que haya reducido la selección, podemos ir juntas a echar un vistazo a las mejores opciones cuando tengas tiempo.
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Mar De Amor [Jenlisa]
FanficEl segundo aniversario de la muerte de Helena había parecido una fecha adecuada, hacía dos noches, cuando condujo sin rumbo, desesperada por alejarse de su vida. Playa Anmok Beach era el lugar más tranquilo que había podido encontrar entonces, y aho...