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— Tengo tres palabras para ti. Mejor. Noche. Jamás. —Jisoo puso una bolsa de regalo sobre la mesa de Lisa y le lanzó una sonrisa. —Y gracias a las dos por hacerme viral en Twitter.

— Ah, sí, ¿cómo va eso?

— Todavía tendencia. —Sonrió. —La verdad es que me siento un poco famosa ahora. Bueno, tengo un regalo para Jennie y para ti.

— Cariño, no deberías haberlo hecho. —Le lanzó un beso. —Ya sabes que tú y Rose siempre sois bienvenidos y sí, fue divertido. Jennie se lo pasó genial también.

— Me alegro. Es encantadora. —Jisoo señaló la bolsa. —Ábrelo.

Lisa sonrió mientras sacaba dos albornoces blancos de algodón preciosos con las iniciales de ambas bordadas en el bolsillo.

— Gracias. Son muy bonitos, es adorable de tu parte. —Frunció el ceño ante el atento regalo. —¿Cuándo los hiciste?

— Ayer, después del trabajo. Hay una tienda increíble en Santa Mónica que personaliza en el momento. Incluso te dan una copa de champán mientras esperas.

— Parecen caros. No tenías que hacerlo.

— Por supuesto que sí. Pasé una noche tan maravillosa y, además, las dos necesitáis algo que poneros cuando tengáis que asistir a todos esos eventos públicos juntas. No puedes dejar que Jennie use tu albornoz tan viejo y cutre. —Jisoo bajó la voz. —Vi un cepillo para el pelo increíble en el cuarto de baño y un rizador de pestañas que he estado deseando comprar durante un tiempo, así que sé que tiene buen gusto. —Levantó un dedo, evitando que Lisa dijera algo. —Por cierto, ¿se ha mudado contigo? Supuse que sí porque vi que todo el mueble del baño estaba lleno con sus cosas. Ah, y no nos olvidemos de la enorme pila de ropa y lencería que había sobre tu cama porque desde luego no eran tuyas.

— ¿Por qué estabas en nuestra... quiero decir mi habitación? — preguntó Lisa, corrigiéndose.

— Lo siento. Solo me di una vuelta por la casa después de haber ido al cuarto de baño. —Se encogió de hombros. —Estaba un poco achispada y me puse cotilla.

— Estar achispada no tiene nada que ver con eso, tú siempre eres cotilla.

— Vale, tienes razón. Lo admito, soy cotilla. Pero todavía no has contestado a mi pregunta.

— Por supuesto que no se ha mudado —dijo Lisa, poniendo los pies sobre la mesa. —Solo llevamos juntas tres semanas, son los primeros días. Además, Jennie tiene un fantástico ático en Seul y una villa en Palm Springs. ¿Por qué demonios iba a querer mudarse conmigo? —Se dio cuenta de que era agradable poder hablar sobre su relación con Jisoo, ahora que no tenía que mentirle.

— Sí, tienes razón. —Se lo pensó un momento. —Bueno, ¿te vas a mudar tú con ella?

Lisa puso los ojos en blanco.

— Déjalo, Jisoo. Nadie se va a mudar con nadie todavía. Y si no, cuando lleguemos a ese punto, ya pensaremos algo. Jennie se queda normalmente en mi casa porque le encanta la vista y le gusta hacer yoga conmigo por las mañanas, y ahora mismo estamos felices como estamos.

— Sí, pero debes haber pensado en lo que va a pasar a largo plazo.

— Pues, en realidad, no —admitió. Estaba tan atrapada en su pequeña burbuja que simplemente estaba disfrutando pasar tiempo con Jennie.

— ¿En serio? —Jisoo volvió a poner su cara dramática. — Bueno, pues entonces necesitas empezar a pensar en eso, cariño. Si Jennie sale del armario y lo hace oficial, y vais a vivir juntas, tu vida va a cambiar a lo grande. Tendrás personal; limpiadores y tal vez incluso un chófer, y no te olvides, la mayoría de la gente sabrá tu nombre e incluso tendrás fans locos. Tu privacidad se irá a la porra y estarás mucho más aislada en tu relación con ella de lo que estarías si simplemente salieras con una mujer anónima. Es posible que nunca podáis salir de compras juntas o salir a pasear por la playa o almorzar en un restaurante popular, así que ya puedes decirle adiós a tu puesto favorito de tacos, por lo menos cuando estés con ella. — Su voz subió un poco mientras continuaba. —Serás examinada públicamente sobre todo lo que hagas mientras estés a su lado, sin mencionar que tendrás que lidiar con todas las mujeres que se lanzarán a por ella. Y luego estarán las revistas, claro, vendiendo historias que implicarán que una o las dos están engañando a la otra... Podría seguir y seguir.

Mar De Amor [Jenlisa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora