Bienvenidos a otro capitulo de zombi. Espero que guste. No olvides comentar y votar esto me ayudara a crecer.
**********************************************************************************************
Entrada 112
Dejé el diario sobre la cama y tomé comida para Bernardo y para mí. El pequeño ya comenzaba a caminar y eso suponía un peligro, tenía que estar más al pendiente de su cuidado y tenía que buscar un mejor refugio para él.
Pensé por in momento en el hotel cuando saqué a Bernardo de ahí. Cuando llegue ahí todo parecía extraño, con todas aquellas personas muertas. Si no hubiera sido por una pobre mujer que estaba más muerta que viva. Estoy seguro que Bernardo estaría muerto. Y aquella cosa, aquella criatura en una de las habitaciones me figuraba como la primera que me encontré dentro de la ambulancia de aspecto gris y acartonado. Acaso Adriana y Juan ya habían comenzado a experimentar antes de mi encuentro con ellos. No aceptaba tal cosa, era tal vez mi imaginación pero solo de recordar lo que hicieron en el campamento me revolvía el estómago.
Vi la botella de Havana y estaba a medias, la tape y guardé el diario por un momento necesitaba concentrarme en Bernardo y tal vez en fortalecer un poco la habitación, todavía no sé qué le paso a esta gente y espero descubrirlo en las páginas que escribió Natalie.
Esparcí un poco de cloro en la ventana y en las puertas de la habitación donde me quede dormido, si esa criatura estaba cerca y podía identificarme por el olor estaba seguro que el cloro lo despistaría un poco. También cubrí la ventana con madera usada que tenían guardada y metí un montón de enlatados que tenían en la pequeña bodega.
De pronto me atacaron los recuerdos de Innis y la culpa regreso a mí. No sabía hasta cuando dejaría de pensar en ella o me perdonaría por lo sucedido con ella. Si tan siquiera estuviera viva, era posible que aun este viva. Esos dos pensamientos me ponían mal. De inmediato fui en busca de la botella para borrar los pensamientos que me angustiaban y antes de echarme el primer vaso vi a Bernardo y eso me trajo a la realidad. Ya no podía seguir así.
En la noche la temperatura estaba bajando y aquí en el sur siempre nos decían que con tantito que comience a hacer frio ya sacamos nuestras ropas de invierno, tal vez sea cierto y eso es porque no toleramos muy bien el frio. Acobije bien a Bernardo y nos quedamos dormidos en unos minutos. Sabía que necesitaba descansar, tantos desvelos acabarían con mi vida antes que lo hicieran los no muertos.
El llanto de Bernardo me despertó en la madrugada, no sabía lo que le pasaba, al principio creía que era hambre, pero después me di cuenta que era algo peor, él empezaba a tener diarrea y vómito, eso me angustiaba, puesto que no era Doctor ni nada de lo que se le pareciera, le toque la frente y el pobre empezaba a tener fiebre.
Fui en busca de algún medicamento para calmar la fiebre pero solo encontraba medicamento para la diabetes y la presión, eso me hizo pensar que en casi todos los lugares a los que iba los encontraba. Era casi una suposición que si no morían del virus, morirían por esas enfermedades. Era curioso que la primera ola de muertos fueron aquellos con esas enfermedades.
Recordé a la vieja Julia y recordé que dijo que cuando el niño naciera era posible que en sus primeros años podía tener infecciones y otras enfermedades y que era posible que no encontrara medicamentos a la mano, así que tenía que echar de las plantas disponibles y lo primero que tenía que hacer es controlar la fiebre. Con un baño de agua fría o paños húmedos solucionaría aquello, un té de manzanilla o de jengibre podrían darme un resultado efectivo aunque más tardado y para la diarrea podrían ser las mismas pero si encontraba hierbabuena sería mejor. Solo para el vómito no sabía que darle, pero me imagino que con las mismas hiervas funcionaria.
En la madrugada cesó la temperatura y el vómito, solo la diarrea persistía un poco. Cuando vi que el niño se quedó dormido pude descansar un poco pero sin quedarme dormido. En la mañana cuando buscaba algo de verduras de las que tenían sembradas, recogí las latas que dejé tiradas y vi que la fecha de caducidad pasaba más de un año, ¡Pobre Bernardo sufrió por mi estupidez, la próxima vez tendré más cuidado con los enlatados.
Pasaron varios días antes que mi pobre chiquito se recuperara, lo bueno es que había muchos chayotes sembrados y calabaza así que no tuve tanto problemas con ello y aunque no me gustaba usar tanto las armas tuve que ir aprendiendo poco a poco para cazar patillos y chachalacas que de esas habían montones.
Recordé un viaje que hicimos con el grupo de la sociedad a Calakmul y Mario nos dijo que ese era un buen sitio para vivir en caso de un desastre, hay muchas especies para cazar, hay refugios altos, mucha madera y el lugar está alejado de todo civilización, lo único difícil de encontrar seria el agua. Estoy pensando que tal vez es mejor marcharnos de aquí e irnos a Calakmul.
Han pasado dos semanas desde que llegué al rancho y tampoco he leído el diario de Natalie, me he estado ocupando de Bernardo y de recoger muchos alimentos para hacer conservas, descubrí que tenían montones de sacos de sal y azúcar almacenados y he decidido hacer varias conservas para ver cual me funciona y aprovechar las frutas que me he encontrado. Hoy en la noche retomaré el diario después que Bernardo se duerma.
Mientras le pegaba el primer trago a la media botella de Havana continúe leyendo las páginas del diario después me di cuenta que no tenía suficiente licor para soportar los horrores que les vino después.
"Mi sobrina me despertó a media noche, tenía la cara ensangrentada y los ojos histéricos. En lo primero que pensé fue en Javier. En ese momento me paré de la cama lo más rápido que pude, la experiencia de este virus me enseñó a estar siempre preparada para cualquier cosa, así que casi duermo vestida para salir corriendo, pero cuando vi a Javier mis huesos se quedaron paralizados. El chico estaba descuartizado en su habitación casi partido a la mitad y la cabeza... ¡Dios! su cabeza estaba partida a la mitad sin nada de cerebro en él. Pensé estar preparada para esto pero me equivoque.
ESTÁS LEYENDO
Sobrevive
HorrorQue pasaría si un día te despiertas y crees que se aproxima un apocalipsis zombi y tú novia muere. ¿Harías lo que fuera para sobrevivir? Este es el diario de un hombre que intenta sobrevivir.