𝐉𝐮𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐒𝐨𝐦𝐨𝐬 𝐌𝐚𝐬 | 𝙺𝚊𝚖𝚊𝚍𝚘 𝚃𝚊𝚗𝚓𝚒𝚛𝚘

~𝐌𝐮𝐠𝐞𝐧 𝐑𝐞𝐬𝐬𝐡𝐚-𝐇𝐞𝐧 𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 4°: 𝐀𝐤𝐚𝐳𝐚~

Pasaron varios minutos, o segundos, no lo se pero al abrir los ojos pude escuchar como dos personas se encontraban hablando por lo que me levante como pude para luego ver a mis lados encontrándome con Rengoku y Tanjiro juntos por lo que me acerque a ellos.

- ¡Tanjiro, Rengoku-san!- grite corriendo hacia ellos preocupada al ver como el pelirrojo se encontraba en el suelo con sangre en su abdomen- ¡¿Qué sucedió?! ¡Tanjiro, hay que parar esa hemorragia!- dije alterada arrodillarme a su lado buscando entre mis ropas alguna venda.

- ___... Estoy bien, gracias a Rengoku-san puedo controlarla- me dijo sonriendo levemente mientras llevaba una de sus manos a mi mejilla.

- ¡Umu! Es bueno ver que te encuentras bien- hablo Rengoku de brazos cruzados mientras me miraba con una amplia sonrisa.

- Muchas gracias, de enserio- le sonreí aliviada ante la noticia- ¿Y usted? ¿Cómo se encuentra?-.

- ¡Perfectamente! ¡Ja, Ja, Ja, Ja!- respondió alegremente mientras reía sin descruzar los brazos.

- Es bueno saberlo, usted es muy fuerte Rengoku-san, por favor enséñeme a mejorar mis habilidades algún día- hable con emoción levantándome del suelo.

- ¡Te convertiré en mi Tsuguko Joven (T/A)!- hablo este sin dejar de sonreír, por mi parte de un momento a otro me estremecí en mi lugar borrando mi sonrisa y sintiendo un olor horrible que me hizo ponerme en guardia al igual que mi mayor, al hacer eso una nube de tierra se levanto en frente de nosotros.

Tras dispersarse vimos a un demonio de cabellera rosa y ojos ámbar pero con un numero en sus dos ojos diciendo "Luna Superior Tres" dejando en claro que es una de las Lunas Demoniacas más fuertes de las doce superiores. En eso de un momento a otro este desaparece llegando así en frente de Tanjiro tratando de golpearlo, trate de llegar pero Rengoku fue más rápido que yo en ese momento cortándole el brazo a la mitad haciendo que el demonio retrocediera.

- Es una buena espada- habla por primera vez aquel demonio sin borrar su sonrisa mientras su brazo se regeneraba enseguida.

- No entiendo el porque atacar primero a un herido- hablo Rengoku mientras yo me colocaba a su lado en frente de Tanjiro.

- Es porque pensé que se interpondría en nuestra conversación- le respondió devuelta este.

- ¿De qué vamos a hablar tu y yo?... Acabo de conocerte y ya te detesto- dijo el mayor seriamente a lo que me encontraba mirando fijamente la luna superior con mi espada en frente mía.

- Ya veo, yo también odio a los humanos débiles... Me dan nauseas de solo mirarlos- dijo el demonio si borrar su sonrisa.

- Parece que tenemos valores muy distintos-

- Tengo una propuesta magnifica para ti... ¿Por qué no te conviertes en demonio?- le propuso el contrario haciendo que frunciera el ceño, el no haría eso, lo se por su olor... Su gran meta de matar a los demonios no le hará ceder ante esto.

- Ni hablar- sonreí de lado ante la afirmación del mayor, ni lo pensó.

- Solo necesito verte para saber que eres fuerte, eres un pilar ¿No?... Refinaste tu espíritu de lucha, esta cerca de ser supremo-.

- Soy el pilar de fuego, Rengoku Kyojuro- se presento el rubio

- Yo soy Akaza- se presento también el contrario- Kyojuro, te diré porque no alcanzas la supremacía... Porque eres humano... Porque envejeces y mueres...- siguió hablando- Conviértete en demonio, Kyojuro- dijo extendiendo su mano en su dirección- Así podrás entrenar unos 100 o 200 años... Te harás mas fuerte-.