𝐉𝐮𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐒𝐨𝐦𝐨𝐬 𝐌𝐚𝐬 | 𝙺𝚊𝚖𝚊𝚍𝚘 𝚃𝚊𝚗𝚓𝚒𝚛𝚘

𝐊𝐚𝐣𝐢𝐠𝐚 𝐧𝐨 𝐌𝐮𝐫𝐚𝐧 𝐏𝐚𝐫𝐭𝐞 6°: 𝐋𝐚 𝐋𝐮𝐳 𝐃𝐞𝐥 𝐀𝐥𝐛𝐚

- ¡Tanjiro, detrás de ti!- no pude ir hacia el al encontrarme devuelta al demonio de ojos rojos atacándome con el bastón, en eso veo como el de mechas amarillas recibe el ataque dejándome atónita por aquella imagen devastadora, vi como el peliburdeo seguía al pequeño demonio por el cual yo me concentre en aquel demonio de ojos rojos- Bien... Terminemos con esto- dije mientras elevaba mi espada hacia aquel demonio, este lo esquiva para luego ver como dirigía la punta de su bastón a mi cuello quedando centímetros de este.

"No podre esquivarlo"

Cerre los ojos al saber que no podria evitarlo pero no siento aquel dolor, abro mis ojos mirando con asombro a mis dos hermanos tacleando al demonio y derrivandolo para ellos colocarse a mis lados protegiendome.

- Yukio, Yushio...- los mire con una leve sonrisa y ellos me la devolvieron.

- Siempre ayudandote hermana- acota el menor de los gemelos acomodandose sus lentes.

En eso veo a la distancia como el demonio de la ira eleva sus manos y en un parpadeo aparecen los otros dos demonios de ojos verdes y amarillos, estos fueron succionados desde las palmas de las manos desde sus cabeza. Me quede algo petrificada al igual que mis hermanos y Genya, despues el demonio corre hacia el de la tristeza el cual quiso evitar lo mismo que los otros pero termino igual que los demas.

Entonces el demonio de ojos rojos fue cambiando su apariencia dejando ver a otro demonio diferente, temble en mi lugar agarrando a mis hermanos del brazo al querer ir en contra de el, en eso el demonio en un rapido movimiento va hacia Tanjiro atacandolo por la espalda.

Del suelo aparecieron dragones de madera atacandonos por lo cual los esquibamos como pudimos, en eso mis hermanos se volvieron a separar de mi dejandome al lado del peliburdeo del cual me ve de reojo y asiento con la cabeza ante su pregunta silenciosa, eleve mi espada al frente preparada por cualquier cosa.

El demonio toca uno de sus tambores haciendo que el mas pequeño sea rodeado de ramas protegiendolo, mire cada accion de cada uno soltando un suspiro al entender que contenia la respiracion.

-¡Detente!- grita el peliburdeo pero se paraliza al recibir la mirada del demonio, la presion del ambiente me hizo caer sobre una de mis rodillas llevando una de mis manos a mi pecho.

- "Me cuesta respirar... Tambien me empezo a doler el corazon, Jesus... Esto es mucho"- pense mirando con el entrecejo fruncido.

- ¿Que quieren?- habla el demonio fijandose en nosotros- Granujas, ¿no les gusta lo que hago?... Malditos villanos -

- Por... ¿Por que?- pregunta Tanjiro mientras temblaba en su sitio y aprieta su mano con fuerza- ¿Por que nosotros somos los villanos?-

- Por que atormentan a los debiles- le contesta el contrario- Trataban de matar a un ser diminuto e indefenso que cabe en la palma de la mano... Que atrocidad tan inconmensurable, es una obra de unas bestias infernales-.

- ¿Un ser diminuto e indefenso?- pregunte parandome de mi sitio y agarrando con fuerza el mango de mi espada y mirando con enojo a la cuarta creciente.

- ¿A quien rayos te refieres? Dinoslo- me siguio el peliburdeo en mi misma situacion- ¡No me jodas!-.

- El olor que viene de ustedes apesta a sangre... ¡Sabemos que haz deborado mas de 100, a mas de 200! ¡¿Que te hicieron a ti esas personas?!- grite con enojo posicionandome para atacar.

- ¿Todos ellos te hicieron algo por lo que deberian pagar con sus vidas?, deja de hacerte la victima despues de matar a incontables personas... ¡Ser de naturaleza retorcida, haremos que pagues por todo!- dicta el de espada negra.