Revelaciones

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Sina y la madre de Hilbert habían llegado al laboratorio del profesor Sycamore.

—¿Qué está pasando? —preguntó la señora confundida por lo sucedido.

—Esperemos un poco —mencionó la joven mientras tomaba un respiro por no estar acostumbrada a correr.

Entonces llegaron Dexio y Sycamore al laboratorio junto a Espeon y Garchomp.

—Supongo que estará algo confundida por todo esto —añadió el profesor Pokémon con una mirada seria—. Vimos el mensaje del holomisor, y después de un análisis, pensamos que tal vez irían por usted, señora...

—Hilary.

—Señora Hilary, el profesor nos dijo que fuéramos a las distintas rutas para ver por cuál huía —reveló el entrenador de Espeon.

—Yo he visto a su hijo en acción. Y también sé cómo es Valerie. Puedo decirle con certeza que debe haber un error —dijo Sycamore mientras miraba la megapiedra de Garchomp.

—Nosotros estuvimos con Hilbert y no parecía malo... algo antipático, pero no malo —expresó Sina con una mano en su mentón como forma de pensar.

—Pero las imágenes se ven muy reales. Tal vez alguien quiso ponerlos en contra —analizó Dexio con detenimiento—. En fin, no podemos saber a ciencia cierta lo que ocurrió.

...

Se encontraba Malva en una especie de laboratorio acariciando a su Houndoom mientras atrás de ella estaba una mujer similar a Celosia, Bryony y Mable, pero su cabello era muy corto de un color anaranjado. Además de traer unas mallas amarillas.

—Hiciste un buen trabajo, Aliana —dijo con una sonrisa.

—No por nada soy la que se encarga de camuflaje con mis tres Ditto. Fue fácil para ellos imitar a ese trío —comentó con una sonrisa.

—Ellos son un obstáculo para el mundo que planeamos hacer —declaró la perversa mujer con una mirada seria.

—Xerosic detectó una señal por parte del profesor Sycamore. En el que habla de la mamá de uno de los estorbos —añadió Aliana mirando a un corrupto miembro del alto mando.

—Ya veo. Manda a Bryony —dijo con una mirada desinteresada.

—Está ocupada trabajando en el laboratorio.

—¿En serio tengo que hacerlo todo yo? ¿Dónde está Drasna? —preguntó fastidiada ante la idea de interferir.

—Pero si estamos en Lumiose, solo tienes que salir —respondió con una gota cómica visible por su rostro.

—No me gusta la idea de arriesgarme. Además, es muy complicado el poder pasar desapercibido para entrar aquí —expresó con seriedad, porque no estaba dispuesta que por un error descubran su escondite.

—Aún así, ¿qué otra cosa puedes hacer?

Malva prendió su holomisor para iniciar una llamada con Lysandre, quién parecía ser el líder de todo esto.

—Tenemos localizada a la madre de Hilbert, pero necesitamos refuerzos si queremos pasar desapercibido —dijo la mujer con una mirada seria, no estaba dispuesta a arruinar sus planes.

—No te preocupes por ellos. Nuestro objetivo principal no son esos niños, sino los líderes de gimnasio —reveló el perverso hombre con tranquilidad—. Tú debes ir con Wulfric. Yo me encargaré del mocoso de Lumiose.

A por una Dracoventura Donde viven las historias. Descúbrelo ahora