Capítulo 13

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Izan

Estoy sentado en mi silla, en la punta de la mesa, con las piernas encima de está. Entre mis dedos tengo un cigarrillo encendido, y mi otra mano rodea el vaso con whisky. Kirian está apoyado en la pared, cruzado de brazos, en cambio Astor, se encuentra sentado en su lugar, también fumando. 

Novak entra con esa ligereza y sonrisa de niño que lo caracteriza. Se sienta en la silla vacía, junto a Astor. Me mira divertido. 

- Tú anarquista invitado, ya se encuentra instalado en una de las habitaciones. - informa. - En un rato le buscaré algo de ropa limpia. 

- Agrega unos paquetes de cigarrillo. - digo. - No quiero descubrir en que se transforma sin la nicotina. Algo me dice que debe ser peor que su estado natural. 

Mi hermano ríe. - Bien. 

- ¿En que habitación está? - pregunto. 

- En la del lado izquierdo, la del medio. - responde, con una mirada provocadora. 

- Le diste.... - comienzo a decir, pero me interrumpen los gritos de nuestra prima. 

- ¡Ese periódico no existe! ¡Es un nombre ficticio! - exclama Anya, entrando a la sala furiosa, a pasos firmes, que retumban hasta por las paredes. - Nadie sabe quien diablos imprimió ese maldito articulo. ¡Estuve toda la mañana en ello! 

Se me forma una leve sonrisa, mientras niego. - Ni me sorprende, la verdad. - digo. - Tengo que concederle que es inteligente, y no tan idiota como creí. 

- ¡No es el momento de alabarlo! - sigue quejándose molesta. - En verdad tenía ganas de perturbar a alguien. Ya había pensado en todo lo que haría. - agrega con decepción. 

- Si quieres te mando a un jardín de niños y te entretienes allí. - digo. - Estoy seguro que más de un padre te lo agradecería. 

Frunce en seño y me observa con esa mirada tan oscura. - No es chistoso. - dice molesta. - Sabes que no me gusta no completar una misión. 

- ¿Se puede saber que harás con él? - pregunta Kirian, haciendo que pose mi vista en él, quien me observa con su semblante serio y esos ojos tan característicos de los Marshall. 

- ¿Lo adoptarás como la mascota del clan? - pregunta Astor divertido. 

- Es buena idea. - le respondo a mi hermano menor, luego de dar una calada. - Necesita adiestramiento. - continúo. - Además, siempre quisimos una mascota. 

- Estoy hablando enserio. - sigue mi hermano, con voz firme. - No entres en su juego, Izan. - sentencia. 

- Precisamente por eso, y porque es un niño, que es tan divertido. - digo, sin darle mucha importancia. - Tú lo has dicho, es tan solo un juego. Nunca nadie ha querido jugar conmigo, todos se rinden antes de siquiera poder empezar a divertirme, quiero saber hasta dónde puede llegar él, cuál es su límite. 

- Tú sigue subestimándolo. - continúa Kirian, tajante. - Para cuando dejes de ser un necio, y te des cuenta de que él lleva la delantera, será muy tarde. 

Lo observo con fastidio. - ¿Te crees que le tengo miedo a un chico, que publicó sobre mi en su boletín universitario? - pregunto con sarcasmo. Río y le doy otra calada al cigarrillo. 

- ¿Por qué no mejor no lo haces parte del clan? - pregunta con ironía. - Ya que se está quedando aquí. Estoy seguro de que tendrá unas buenas ideas, vendría bien tener a alguien con cerebro, para variar. 

- Aguarda. - lo detiene Anya. Me mira. - ¿Qué? ¿Cómo que se está quedando aquí? - sigue preguntando extrañada. - ¿Qué no ibas a dispararle? 

- Si, ese era el plan original, pero cambie de parecer. - respondo y sigo fumando. 

Hijo de la Mafia (Mafia Marshall IV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora