La consejera sexual de Ashton| EN FÍSICO

Capítulo 53

COMENTARIO ESTRELLA (16/04/2022): Amo-a-ApoloH-00 Yo literal puedo estar de cualquier humor y cuando veo tus actualizaciones, se me pasan.

Capítulo 53| Hagámoslo de nuevo.

Intenté no mostrar mi desconcierto ante la palabra que soltó Ashton, pero examinando mejor al hombre, el parecido era visible. Más que nada en su mirada. El azul y la forma de sus ojos, era Ashton con unos cuantos años más, y una muy mala vida de vicios. 

Unas risas masculinas me llamaron la atención, y al voltear pude ver a un grupo de cuatro hombres que nos observaban. Desvié la mirada de inmediato, de nuevo al hombre frente a nosotros y evité pensar en el escalofrío que me recorrió el cuerpo.

El padre de Ashton, si es que a ese tipo se lo podía llamar padre, dio un paso en nuestra dirección, pero se detuvo cuando el chico a mi lado dio uno atrás.

Sus manos, con las uñas manchadas de negro, fueron a parar a los bolsillos traseros de sus vaqueros, y sonrió debajo del manojo de barba desprolija y con algunas canas.

—Que sorpresa, no pensé verte por aquí —tosió.

Ashton me dio una mirada sobre su hombro y le sonreí de inmediato. Volvió a mirar a su padre.

—Vivo en esta ciudad hace años. Lo sabes —le recriminó, pareciendo tranquilo. 

Pero yo podía seguir sintiendo su tensión. 

El hombre volvió a sonreír. Y yo me dediqué a no apartar los ojos de él, con mala cara. Estaba tratando de que no se notara mi disconformidad ante su presencia, pero era evidente que no me estaba saliendo bien. 

—Si... pero bueno —murmuró y sus ojos repararon en mí. Me dio una repasada de pies a cabeza y volvió su atención a Ashton.  Al menos no me había mirado con perversidad —. ¿Y esta chica? ¿Tu novia? ¿Es de la que me hablaste aquella vez?

Incómodo.

Ashton bajó la mirada y lo vi hacer el amague de voltearse de nuevo en mi dirección y mirarme, no lo hizo. 

—No. Terminé con ella. La verdad...

La carcajada ronca y divertida del tipo lo interrumpió, y el agarre en mi mano se hizo más fuerte. Hice lo mismo, solo para que notase que le prestaba atención. 

—Hijo de tigre, no sueltas a una que ya tienes a otra.

Ahogué una risa incrédula, aunque no evite la mirada, y abrí la boca consternada. Di vuelta el rostro y mordí mi labio inferior para no soltar una cantidad de razones coherentes del por qué su comentario había estado fuera de lugar. Pero sabía que en primera instancia, no lo entendería, y en segunda, no haría pasar un peor momento a Ashton.

—Claro —el tono cortante que empleó Ashton no pasó desapercibido por el hombre. 

Dejó de reír y miró a los tipos que yo había visto hacía nada. Luego volvió su mirada hasta nosotros, pero clavó los ojos en mí.

El desprecio era mutuo y ni nos conocíamos.

—Un gusto, niña. Espero estés cuidando bien a mi hijo.

Sonreí con sinceridad. Con sinceras ganas de insultarlo. Recordaba muy bien como Ashton me contó que ese tipo hizo su vida un infierno y como aceptó dinero para darle la custodia al, en ese entonces, novio de su ex mujer. 

Di un paso adelante, a pesar de que Ashton me dio una mirada de advertencia que ignoré. 

—Me imagino que a usted debe importarle mucho eso, que cuiden de Ashton.