𝕻𝖊𝖗𝖉𝖎𝖙𝖎𝖔𝖓 |𝕯.𝕸| PAUSADA

ℭ𝔞𝔭𝔦́𝔱𝔲𝔩𝔬 16

Punto de vista de Natalie Parkinson

Las cosas en Hogwarts eran un completo desastre.

Umbridge había sido nombrada Suma Inquisidora y cada segundo, estaba haciendo entrevistas a los profesores.

De hecho, ayer mismo antes del entrenamiento de quiddich, se había dispuesto a despedir a la profesora Trewarley.

Sin embargo, Dumbledore consiguió impedirlo.

Vamos, como ya había dicho; un completo desastre.

Respecto a Draco... Las semanas habían pasado y seguíamos igual de bien. Nos intentábamos encontrar lo más que podíamos... Y bueno... Ya sabéis como acababan la mayoría de las veces.

—¿Tienes que irte?—me preguntó Draco haciendo un puchero, mientras me levantaba de su cama y comenzaba a abrocharme la blusa.

Puse los ojos en blanco y me volví a sentar a su lado, para darle un casto beso en los labios.

—Ya sabes que he quedado con las chicas para ir a Hogsmade—le recordé mientras me separaba de el y comenzaba a ponerme los botines.

Draco suspiró, comenzando él también a vestirse.

—¿Nos vemos luego?—me preguntó mientras me ponía la chaqueta.

Sonreí y me acerqué a él, para darle un besito en la mejilla.

—Ya sabes que sí—dije sonriendo, para luego separarme de él y salir de la habitación.

***

—Vaya, vaya—dijo Pansy, cuando me vio aparecer donde habíamos quedado.

—Ya pensábamos que no venías—me pinchó Daphne.

Puse los ojos en blanco y comenzamos a caminar hacia Hogsmade, con cuidado de no resbalarnos, ya que había comenzado a nevar y todo el suelo estaba helado.

Al cabo de diez minutos, llegamos a Hogsmade y nos dirigimos a las Tres Escobas, principalmente para entrar en calor.

—¿Y esos que hacen ahí?—nos preguntó Tracey, señalándo a un grupo de gente de Hogwarts, liderado por Harry, que estaban entrando por la parte de atrás a las Tres Escobas.

—Será alguna reunión para poner a caldo a Umbrdige—dijo Daphne, encogiéndose de hombros.

Entonces, mi mirada se detuvo en Pansy, la cual se encontraba observando a Hermione con suma atención.

—Tierra llamando a Pans—exclamé, captando su atención—¿Estás bien?

Ella se apresuró a asentir, para entrar junto a Daphne y Tracey en las Tres Escobas.

—Bueno, bueno—dijo Tracey, cuando ya nos hubimos sentado—Momento de chicos.

Las tres pusimos los ojos en blanco.

—¿Pansy?—empezó Tracey a hacer la ronda.

—Igual de sola que la señora Norris—contestó secamente, provocando nuestra risa.

Tracey suspiró, para luego girarse hacia Daph:

—¿Daphne?

La rubia miró a la mesa, un tanto incómoda.

—Bueno, ya sabéis que me estoy acostando con Theo... Pero cada vez está más frío... Como si estuviese perdiendo el interés en mí—murmuró Daphne, completamente abatida.

Pansy le acarició la espalda.

—Lo siento Daph—dijo Tracey, un tanto cohibida por haber metido la pata.