ℭ𝔞𝔭𝔦́𝔱𝔲𝔩𝔬 24

169 12 2
                                    

El verano había terminado y había sido el más extraño de mi vida.

Mi familia, desde las noticias del Señor Oscuro, se encontraban... Raros...

Una especie de aura de frialdad les rodeaba, como si estuviesen esperando algo...

Había escrito a mis amigos miles de cartas. Contestaron todos, menos Draco y Theo.

Blaise había contestado... Pero siempre vagas respuestas.

Y os preguntaréis, ¿por qué no fuiste a visitar a Draco?

No lo hice, porque mi familia nos llevó a una casa que teníamos a las afueras de Parí Y aunque quisiese, no me hubiesen dejado ir ni de broma.

Ahora mismo, me encontraba con mi corazón golpeando fuertemente a mi caja torácica, mientras esperaba, justo a la entrada del vagón, a Draco.

Mi respiración se cortó cuando le vi aparecer junto a Theo. Estaba guapísimo.

Había dejado su característico flequillo y ahora lo llevaba peinado hacia un lado. Sus facciones se encontraban mucho más definidas, dándole mucha más madurez. Aparte de que se encontraba mucho más alto.

Enseguida, fui a su encuentro y me lancé a sus brazos. Pero él no se movió.

Extrañada, me separé de él; observando como ni siquiera había bajado su mirada a verme. Solamente le hizo un gesto a Theo para que se fuese, mientras me separaba de él.

—Draco... —él me cortó.

—No vuelvas a abrazarme Parkinson. Hazte un favor y desaparece de mi vista.

Sus palabras se me quedaron grabadas; al principio del quinto año, me había dicho lo mismo...

No...

—Draco que...—dije confusa, mientras me comenzaba a dar cuenta de lo que estaba pasando.

¿Se habría cansado de mí?

—He dicho que te alejes de mí-repitió duramente—Lo del año pasado, fue solo un juego estúpido. Punto. Olvídate de mí—dijo él con su gran frialdad. Esa frialdad que tantas veces me había hecho llorar.

Intenté decir algo, pero no me salía la voz.

No me lo podía creer... ¿Dónde estaba el Draco que me había besado y dicho que me quería?

Él continuó su camino. No se giró. Ni siquiera me miró.

Y en esos momentos, fue como si me rompiese en mil pedazos.

Punto de vista de Draco Malfoy

Cuando la vi, frente al vagón, fue como si algo se rompiese en mí, sabiendo que no iba a poder estrecharla en mis brazos.

Caminé lo más fríamente que pude hacia ella, rezando para que no me intentase hablar.

Fue peor.

Ella misma se colocó a sí misma entre mis brazos y decir que se me cayó el alma, fue poco.

No me moví en ningún momento y ella, extrañada, se separó de mí; observando como ni siquiera había bajado mi mirada al verla. Solamente le hice un gesto a Theo para que se fuese, mientras se separaba de mí.

𝕻𝖊𝖗𝖉𝖎𝖙𝖎𝖔𝖓 |𝕯.𝕸| PAUSADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora