𝚂𝚝𝚊𝚛𝚜 𝙰𝚗𝚍 𝚁𝚘𝚊𝚍𝚜

Capítulo XXX

Zachary

No sé que le habrá pasado a Liam, pero he ido a sus ensayos las suficientes veces como para saber que Kiara tiene coros hechos por Liam en prácticamente todas las canciones. Así que, como me sé las canciones incluso antes de ir a los ensayos, decidí subir a hacerle los coros en cuanto salieron a cantar y, cuando vi la sonrisa de Kiara al verme, supe que había hecho bien.

No me esperé el abrazo que me dio después, aunque obviamente se lo devolví, hasta que desgraciadamente Ibbie nos separó. Estuvimos hablando un poco, aunque la paz no duró mucho, porque de la nada me veo como el estúpido de Jahaziel la está abrazando.

<<¿Se puede saber qué se cree que está haciendo?>>

Lógicamente la separo de él, conociendo a Neftalí no me fio ni un pelo de su hermano, así que la atraigo a mi y me pongo entre los dos.

–¿Qué se supone que haces, Durand? –se molesta Jahaziel cuando la aparto.

–¿Qué se supone que haces tú, Snake?

Kiara se pone entre nosotros.

–Muy bien chicos, ya nos ha quedado claro que ambos sois dos machitos con demasiada testosterona, no quiero peleas después de mi concierto –advierte, mirándonos a ambos.

–Muy bien –Jahaziel levanta las manos en son de paz y deja de mirarme para mirarla a ella –No me contestaste el mensaje ayer, señorita.

–Si no lo hizo por algo será, ¿no crees? –le contesto a la defensiva.

–No hablaba contigo –me responde, con calma.

–Me voy –antes de que Kiara se aleje mucho, la detengo.

–¿Dónde vas?

–Oh, ¿ahora sí me prestas atención? –suelta.

–Siempre te presto atención.

–Muy bonito –interrumpe Jahaziel mientras se acerca a nosotros y no puedo evitar rodar los ojos –Kia, ¿quieres cenar conmigo mañana?

–No, no quiere, va a cenar conmigo mañana.

–Oye, ya está bien los dos –llama nuestra atención, irritada –No puedo cenar contigo mañana –le dice a Jahaziel, así que no puedo evitar sonreír con suficiencia –Y contigo tampoco –le frunzo ceño –Y ahora, caballeros, si vais a discutir sobre quien la tiene más larga, yo me largo.

Kiara se suelta de mi agarre y la veo irse con los demás. Voy a ir con ella cuando Jahaziel se pone enfrente mía, bloqueándome el paso. Lo rodeo para seguir mi camino, pero no me da tiempo a dar más de dos pasos antes de que me lo vuelva a bloquear.

–Quítate del medio –lo echo a un lado pero se mantiene en su lugar, sin moverse.

Se está ganando un puñetazo...

–Tengo que hablar contigo –me dice.

–No me interesa lo más mínimo lo que tengas que decirme, apártate.

–Bien, entonces le diré a mi hermano que ya puede empezar con su plan, porque ni siquiera te has dignado a escuchar lo que quería que te dijera –se aparta.

Me acerco a él.

–Mira, trozo de mierda, dile al subnormal de tu hermano que me paso sus amenazas y todo lo que me tenga que decir por donde tú y yo sabemos, así que dile que deje de gastar su estúpido tiempo en buscarme las cosquillas y que si está aburrido dile que se meta un palo por culo, ya verás como así se entretiene.

No le doy tiempo a réplica y me voy con Kiara y los demás. Para cuando me vuelvo a dar la vuelta ya no hay ni rastro de Jahaziel.

–¿De qué hablabais? –me pregunta Kiara curiosa, en un tono solo para nosotros.