Narrador omnisciente
Matu fue la primera en despertar sintiendo un caliente brazo presionado contra su cintura y parte de su abdomen descubierto, la joven se sonrojó ante las imágenes del día anterior, rápidamente recordó los húmedos labios de la mayor chocando contra los suyos para luego estos comenzar a descender por su cuerpo, adueñándose de su expuesta piel. La peli negra sonrió intentando girar sobre el colchón, luego de un par de minutos la menor pudo lograr su cometido sorprendiéndose de notar las pacíficas facciones de la castaña. Guardo silencio al notar el revuelto cabello de la contraria, se veia tan linda descansando con su mejilla presionando la almohada, que, deseaba de todo corazón el memorizar aquella imagen por el resto de sus días, Matu sentía que había muerto, y aquello le agradaba, saber que se encontraba en el mismísimo infierno le provocaba unas sensaciones inexplicables, porque se trataba del infierno de Daniela Calle, el mejor lugar que pudo desear. La peli negra suspiró estirando una de sus manos, la suavidad de las yemas de sus dedos chocaron contra el pómulo de la contraria notando como Daniela arrugaba el cien de una forma adorable. La peli negra trapó su labio inferior intentando no reír ante lo que estaba presenciando, su corazón rápidamente comenzaba a jugarle una mala pasada ante lo evidente, amaba a la muchacha, amaba cada parte de ella como si no tuviese un mañana, y le dolía, diablos, claramente le dolía. La sonrisa que mantuvo por algunos segundos se borró ante sus crueles pensamientos, Daniela no la amaba y aquello la mataba, con tristeza la joven tomó la decisión de salir de la vida de la mayor, aun cuando aquello significaba su triste agonía, Matu con dificultad alejó el tacto de la castaña observando con los músculos tensados el como la muchacha se giraba dejando su espalda al descubierto, Matu tomó grandes bocanadas de aire a la vez que se levantaba de la cama, con pasos lentos y tranquilos la peli negra comenzó a recoger sus prendas intentando no despertar a su bella acompañante de cama.
- Lo siento Dani - susurró Matu a la vez que le daba un último vistazo para luego huir de la habitación.
Luego de un par de minutos Daniela comenzó a despertar por culpa de aquellos pesados rayos de sol que se colocaban por debajo de sus persianas, la joven gruñó estirando sus manos hasta chocar las palmas contra el respaldo de su cama, la castaña jadeó girando su rostro en dirección de Matu, rápidamente cada hueso de su cuerpo crujió proporcionándole aquella conocida sensación de placer que cada mañana recorría su ser.
- Buenos dia... - Su saludo quedó atrapado en su garganta al ser consciente de la fría ausencia de la menor - ¿Matu? - preguntó levantando su cuerpo con ayuda de sus brazos - ¡¿María José?! - alzó la voz con fuerza.
Lentamente la angustia había comenzando a apoderarse de sus pensamientos obligándola a levantarse de la cama. Daniela observó la falta de ropa regada en el suelo de su habitación, velozmente encorvó su espalda contrayendo su abdomen para tomar su sostén deportivo. Al tapar su pecho la joven abandonó su habitación sin siquiera importarle cubrir su descubierto abdomen. Los músculos de la castaña se contrajeron al oir la suave voz de su madre conversando animadamente con otra persona, instantáneamente sus comisuras se alzaron marcando una adorable sonrisa en su rostro, sin esperar más la muchacha bajó los peldaños saltándose uno que otro escalón, corrió en el momento que llegó a la primera planta en dirección de la cocina, su pecho subía y bajaba con fuerza en el momento que ingresó en aquella reducida habitación, sintiendo como todo su cuerpo se paralizaba por completo dejando su mente en blanco.
- Mat... ¿Hola? - habló la castaña alcanzando a dejar colgada el apodo de la peli negra, su respiración quedó atrapada en su garganta al ver a la madre de María José cocinando con su madre, si aquella mujer estaba en su hogar significaba que; irremediablemente la peli negra también debiese estar rondando por algún lugar de su hogar. - Señora Garzón - saludó Daniela estirando rápidamente su mano.
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SOLO AMIGAS
FanfictionDaniela amaba en completo silencio a María José ya que era consiente de que esta solo la veía como una amiga más. Adaptación cache Calle gip Original de: @Meltwinter