Narrador omnisciente
Daniela suspiró observando su plato de comida como si tuviera el mayor entretenimiento de esos momentos, hizo una mueca en el instante que tuvo el tenedor de plástico enterrando la punta de este en la ensalada, no tenía apetito, su cerebro estaba muy concentrado en el recuerdo de Maria José como para tomarse la molestia de sentir hambre. La castaña apoyó uno de sus codos sobre el frío metal de la mesa llevando rápidamente su palma contra su mejilla, se quedó de aquella forma; con el peso de su cabeza sostenida con la parte dura de su mano mientras que las yemas de sus dedos se adhería a en su lacio cabello castaño. De repente, una fuerte discusión la sacó de su pequeño trance alzando velozmente la quijada en dirección del ruido; Grande fue su sorpresa al ver a la morena ingresando en el comedor con las manos alzadas mientras que, sus apetecibles labios se movían al compás de sus desbordantes palabras, Daniela frunció el ceño teniendo el inevitable sentimiento de curiosidad al notar quien había sido el idiota en enfurecer a Maria José. Por instinto la castaña sonrió al ver como el rostro de se hacia el acto de aparición dejando a la vista del público el cuadro de arte que la castaña había creado con sus puños. La castaña rio entre dientes llevando su dedo pulgar a los labios, lo estaba disfrutando, le agradaba la idea de saber que solo ella había sido la creadora del nuevo rumor que estaba formando en el comedor, "¿Quién lo golpeó?", " debió ser un chico mayor que él, quizás "," no quiero pensar como quedo su rival "," se lo merece es un idiota " y un sinfín de comentarios más recientemente a murmurar logrando que Daniela simplemente observara a la pareja con sus ojos brillando en diversión. La joven no lo iba a negar, se sentia intrigada por la discusión, aun cuando estos se limitan en alzar la voz, la castaña no era capaz de entender muy bien el conflicto principal.
- ¡Eres una zorra! - escupió se con furia mientras daba uno que otro paso en dirección de su novia - Una puta barata, ¡Eso es lo que eres Maria José! - su deseo por humillarla no tenía límites.
Daniela escuchar las claras palabras del pelinegro no pudo evitar apretar sus puños, con rapidez su quijada se tensó observando como el pelinegro le propinaba un fuerte empujón al hombro de la joven, sus pulmones se estrujaron provocando que tuviese que entreabrir sus labios para inhalar una cantidad exagerada de oxígeno, no lo estaba soportando, realmente no podía ver como él humillaba a la morena. A pesar de querer levantarse y volver a golpear el amoratado rostro del chico, la castaña no ejerció ningún tipo de movimiento, se quedó en su asiento con su caliente mirada posada en la pareja, no era capaz dealzar la voz, de correr donde Maria José y envolverla en sus brazos, no podría cuando los recuerdos del daño que ella le causó golpeaba sus pensamientos. La voz de Sebastian retumbaba con fuerza en el lugar logrando erizar la piel a más de uno. La castaña en cambio seguía en su mismo estado neutral sintiendo una que otra mirada curiosa posada en su cuerpo, por alguna extraña razón comenzando a sentirse cohibida, ¿A caso la discusión era su culpa?, No le caía otra duda en esos instante, la forma que los testigos la observaban le confirmaron que entendía, efectivamente su nombre tenía una relación con la pelea. Daniela intento esconderse agachando su rostro, anhelaba sentir que el plato era más interesante que la discusión en sí.
- ¡Nadie me deja, y menos lo harás tú! - vociferó el pelinegro acompañado por el seco sonido de una bofetada.
Daniela alzó su mirada notando a Maria José de rodilla contra el suelo del comedor; antes de siquiera poder reaccionar, un par de muchachos se acercaron donde el pelinegro reteniéndolo entre sus brazos para que este no se abalanzara contra el cuerpo de la morena, la castaña parpadeó al ver como uno de los jóvenes se acercaba donde la morena tomando con suavidad el brazo de esta, Daniela apretó nuevamente su quijada sintiendo la ira consumiendo sus pensamientos; debería ser ella y no él.
Su oscura mirada observo como Maria José comenzó a correr hacia la salida del comedor siendo rápidamente seguida por las miradas de los demás estudiantes. Daniela no lo penso, simplemente se levanto de su asiento y corrió detrás de la muchacha, sin tener un motivo claro de lo que haría cuando la tuviese de frente. La castaña le dio un fuerte golpe a las puertas del comedor girando su rostro hacia los lados, con rapidez fue capaz de percibir la bonita melena oscura moviéndose de un lado hacia el otro al ritmo de las piernas de Maria Jose. Sin esperar más, Daniela comenzó a correr en la misma dirección de la mayor, su respiración chocaba contra el aire a la vez que sus fuertes pisadas llamaban la atención de Maria Jose.
![](https://img.wattpad.com/cover/308258145-288-k715409.jpg)
ESTÁS LEYENDO
SOLO AMIGAS
FanficDaniela amaba en completo silencio a María José ya que era consiente de que esta solo la veía como una amiga más. Adaptación cache Calle gip Original de: @Meltwinter