Capitulo 23

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Las personas más peligrosas son las que menos te imaginarias.

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Capitulo 23

—La evidencia fue encontrada en la escena del crimen —la voz de uno de los agentes  fue lo único que se escucho en la habitación blanca —Es este encendedor.

Aquel objeto que casi nos llevaba al mismo destino de las víctimas del muñeco diabólico, fue puesto sobre las manos de Scott West o más bien, la bolsa donde adentro estaba el encendedor.

Desde la pequeña distancia podía ver la mala cara que el siempre llevaba.

Estábamos en la sala de espera, sentada junto a Arthur y Nicolás a mis lados, mientras que los agentes que estaban ahora en el caso de este accidente se movían con pequeñas evidencias que habían podido obtener.

Por suerte yo sólo había tenido raspones y alguno que otro moretón, nada grave. Sin embargo, me sentía cansada, además no paraba de pensar en el porque quisieron volarnos y quemarnos. 

No había algún motivo, ¿no?

La respuesta más clara que tenía, y la más obvia para mi, era que uno de ellos sólo lo hizo por divercion o algo así. Tengo entendido, gracias a la señora que fue amable conmigo, que siempre pasaban esa clase de accidentes. Aún así, no pretendía quedarme sentada a ver como seguía sucediendo, hablaría con mi padre para que meta vigilancia en esa zona, por que no era justo que los mismos pobladores tuvieran miedo de salir de sus hogares.

Aún con eso que sabía, dudaba y lo hacía por qué definitivamente se tomaron el tiempo de esperarnos, con eso me refería a que, aquella persona sabía que acabábamos de bajar del auto.

Quizas estaba espiandonos

Me levanté sin ninguna prisa de la esquina en la que estaba. Me acerqué a Scott West que estaba conversando con uno de los que estaban en este nuevo caso, me detuve en frente de ambos y espere a que se dieran cuenta de mi presencia.

—Ya mandamos más de nuestros colegas a la escena por más pistas —hablaba el pelinegro —Buscaremos huellas y cuando tengamos información se lo haremos saber.

La mirada de Scott era una dura y fría, que de vez en cuando hacia que el agente desviara la mirada con quizás nerviosismo.

Había veces que me parecía algo chistoso de ver como muchos dudaban hasta en hablarle, pero había mucha más veces que pensaba en si en realidad le tenían miedo o respeto.

Carraspe la garganta para que me mirara, por que parecía no notarme y si lo hizo, entonces sólo estaba ignorandome.

Me causaba enojo que fuera de esa forma. Comprendía que lo hiciera en su trabajo, pero ¿con su familia, enserio?

El agente me miro por un instante, dejó de hablar y se quedo pasando la mirada de manera incómoda entre Scott y yo varias veces.

—Bueno, es toda la información que le tengo, comandante —rascó su barbilla aún viéndonos —Me retiro.

Caminó casi corriendo. No pude evitar mirarlo de forma rara

—¿A qué vienes?

Hice una mueca, ¿siempre tiene que estar de malas?

—¿Ya te dijeron que pasó?

Cruzó sus brazos sobre su pecho

—No.

Brais: Un pueblo con seres oscuros y sangrientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora